Corredora
Aroa hace años llegaba a fumarse una cajetilla de tabaco al día y ahora forma parte de la selección para el mundial Ultratrail, su vida ha cambiado drásticamente: "Cuando corro soy feliz".
Cambiar de hábitos ha llevado a Aroa Sío a ganar en vida. Antes era esclava del tabaco y de la vida sedentaria hasta que un día dijo hasta aquí. Se propuso correr un kilómetro y se ahogaba: "Me dolía el pecho y me faltaba el aire y con 36 años estaba así por el tabaco", sin embargo, ahora forma parte de la selección para el mundial Ultratrail.
Por esta razón Aroa dijo basta y dejó el tabaco para cuidar su salud: "Cuando corro siento una sensación de libertad, ahora me voy a la montaña y cuando corro soy feliz", asegura Aroa.
Porque tras veinte años como fumadora: "Fumaba un paquete de cigarros al día, desgraciadamente", y una vida sedentaria: "No tenía vida", cambió el chip para convertirse en una deportista de élite: "A veces tomar decisiones indignificantes pueden darnos grandes cambios en nuestras vidas", nos cuenta.
"Soñaba que volvía a fumar"
Ahora está preseleccionada con España para el Mundial de Ultra Trail y es verdad que alguna pesadilla le ha quitado el sueño por las noches: "Soñaba que volví a fumar pero luego cuando me despertaba me daba cuenta de que era un sueño y decía menos mal".
Sin embargo, no le ha impedido seguir cuidando lo más importante: su vida. "A veces somos nosotros los que nos limitamos, solo hay que tener muchas ganas", concluye Aroa.