Obituario
Muchos grandes reporteros y periodistas dicen, después de una carrera extensa y habiendo sido reconocidos por su trabajo, que lo que son en realidad, lo que se consideran después de tantos años de profesión es, simplemente, contadores de historias. Eso era el periodista Tico Medina.
Tico Medina era un auténtico contador de historias. Maestro de maestros y de cualquier periodista con un mínimo de olfato que se cruce en su camino. Andaluz, de Granada para más inri, de corazón de pueblo y cabeza universal, Tico es historia viva del periodismo español.
De mirada pícara e inteligente, no podía evitar jugar con el lenguaje y las palabras constantemente, como un niño siempre con su juguete nuevo. Si nadie hubiera inventado la ironía él lo habría hecho, junto con el talento de darle triple sentido a las palabras. Conocía bien el alma humana, con sus vicios y virtudes seguramente de tantas historias contadas y vividas. Y así se lo reconocían en vida y, por supuesto, en estos momentos sus compañeros de profesión.
Entrevistador nato, donde se movía con una destreza y un sigilo de felino cazador. Tico es seguramente el primer periodista español que innovó en el género de la entrevista, haciendo valiente a la pregunta, lanzándola en el momento preciso y exacto para que la respuesta fluya inconsciente y verdadera.
Escolástico era su nombre, Tico para todos.
Escribió su primera poesía con 7 años, en el pueblo granadino de Piñar, donde nació. De su familia solo su abuelo Salvador tenía alguna relación con la escritura, redactaba las actas judiciales del Ayuntamiento añadiendo algo de estilo al estricto lenguaje jurídico.
"Innovó en el género de la entrevista, haciendo valiente a la pregunta, lanzándola en el momento preciso y exacto para que la respuesta fluya inconsciente y verdadera"
El primer paso hacia su carrera periodística fue recalar en Granada Radio donde tuvo a su primer maestro, Pepe del Real. Posteriormente, Madrid, en el periódico Informaciones y en el diario Pueblo, donde siguió creciendo como periodista hasta la llegada de la televisión.
Sus inicios en la televisión
Pionero de la televisión en los comienzos de TVE, allá por el año 1957, creando, conduciendo y dirigiendo programas en una televisión incipiente y encorseta al máximo por el régimen de Franco.
Pero este hecho no le impidió crear e innovar programas que en su mayoría tuvieron mucho éxito, pero que en ocasiones no fueron comprendidos por el gran público. Una audiencia poco acostumbrada a la modernidad y la innovación pero que posteriormente, el mundo de la crítica especializada sí reconoció la importancia y el valor de sus propuestas, considerándoles programas de gran originalidad, vanguardistas, adelantados a su época.
El mismo Francisco Umbral, al que Tico Medina entrevistó en varias ocasiones, en su columna de El País 'Diario de un Snob', en el año 1978 le escribió a Tico: “Durante los años del franquismo Tico Medina llegó a ser el ejemplo y la encarnación en carne joven y ruda del único periodismo que se podía hacer, que eran exactamente el que no se podía hacer”.
Fue corresponsal del área del Caribe para TVE ubicado en México, redactor jefe de la revista Hola, jefe de reporteros del Diario ABC, presentador y director de programas de Televisión a la vez que escritor.
“Durante los años del franquismo Tico Medina llegó a ser el ejemplo y la encarnación en carne joven y ruda del único periodismo que se podía hacer, que eran exactamente el que no se podía hacer”.
Ha practicado la suerte de la entrevista con algunos de los más grandes personajes del siglo XX; Fidel Castro, El Che Guevara, Teresa de Calcuta, Salvador Dalí, Pablo Picasso, su Majestad el Rey D. Felipe VI, su padre D. Juan Carlos de Borbón y su abuelo D. Juan de Borbón, entre otros. Más de 40.000 entrevistas a lo largo de su carrera.
Una trayectoria de premio
Aunque Tico no fue un hombre de medallas, ha recibido numerosos galardones, entre ellos la Medalla al Mérito del Trabajo, Medalla de Oro de Andalucía, Premio Ondas, y la Antena de Oro
Dentro de la crónica social ha sido un referente, ha conocido profundamente e incluso escrito la biografía de algunos de los más grandes, como Julio Iglesias y Lola Flores. Ha publicado 20 libros, ha tenido cuatro hijos y plantado seguramente más de un árbol.
"Tico Medina es un impenitente narrador, un extraordinario contador de historias, una de las figuras más relevantes de la historia del periodismo español"
Pero sobre todo, Tico Medina era un impenitente narrador, un extraordinario contador de historias, una de las figuras más relevantes de la historia del periodismo español.
Tico era una de esas personas que cuando empezaba a hablar, al instante de haberle conocido, quedabas atrapado en sus palabras, en sus historias, en cómo las transmitía, en cómo las contaba, todo sazonado siempre con no poca ironía y sentido del humor. Su mirada siempre estaba llena de vitalidad, de curiosidad y determinación aunque en los últimos años a veces esa mirada necesitara descansar más a menudo.
A través de sus ojos y sobre todo de su sonrisa cómplice y pícara se reconocía al Tico de siempre, curioso de todo con ganas de seguir aprendiendo y hacer lo que más le gusta, escribir y contar historias.
Un magnífico conversador que para el que lo escuchaba se convertía en una clase magistral de periodismo y de olfato para encontrar una historia donde a nadie se le hubiera ocurrido mirar.
Un comunicador puro, con casta, periodista de raza, de los de antes, de los que cada vez, los profesionales del mundo de la información echamos más de menos.