Música
Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina han llenado la pasada noche del lunes de buena música, bromas y recuerdos el escenario de un Wizink Center (Madrid) a 12.000 personas en el primero de los cuatro conciertos previstos en su tercera gira "No hay dos sin tres".
Compartieron atuendo en las primeras canciones, unas americanas negras con flores, eso sí, Sabina con su tradicional bombín. Hicieron disfrutar y reír al público con sus canciones de siempre, algunas anécdotas de sus largas carreras y guiños a la actualidad a lo largo de casi tres horas.
Tras interpretar su primer tema, "Voy a salir esta noche contigo", se preguntaron "¿Y qué hacemos aquí juntos de nuevo, juntándonos y separándonos como replicantes Elizabeth Taylor y Richard Burton?". Recordaron cuando a uno de los Rolling Stones le preguntaron en una entrevista si seguían de gira por dinero y él respondió: "¿Y qué hay de las chicas y las cervezas?".
En la introducción anunciaron que sería "un concierto antológico que es una retrospectiva" que iba a comenzar con "una canción que tienen en su memoria más ancestral", para empezar a cantar "Cinco lobitos tiene la loba". Entre las risas del público interpretaron "No hago otra cosa que pensar en ti" y seguidamente, Serrat cantó "Las malas compañías", después de asegurar, solo en el escenario, que Sabina no era tan buen amigo como parecía y que creía que Netflix "son unas toallitas desechables para las pérdidas de orina".
Esta no fue la única alusión a la edad de ambos durante el concierto, ya que Sabina explicó a continuación que no le decía nada a Serrat porque sus padres le enseñaron "a no quitar la razón a las personas mayores". También hubo algunas bromas relacionadas con la actualidad como cuando Serrat juró "por el flequillo de Puigdemont" o Sabina le amenazaba: "Y si cuentas la verdad te voy a poner un pin parental".