EL REFLEJO DE UNA REALIDAD DE MILLONES DE PERSONAS
El fotoperiodista estadounidense Brian Sokol muestra en CaixaForum Barcelona una serie de fotografías de gran formato realizadas en países de África y de Oriente Medio que le sirven para documentar cuáles son los bienes más preciados para las personas obligadas a abandonar sus países.
La exposición, "The most important thing. Retratos de una huida", organizada por la Obra Social "la Caixa" y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), es un proyecto que quiere sensibilizar a la ciudadanía occidental sobre cómo afecta a las personas el hecho de verse forzadas a huir de sus casas, ya sea por una guerra o por una grave crisis humanitaria.
Sokol ha comentado que ha querido poner su mirada en diferentes personas y que estas se dejaran fotografiar con el objeto más importante para ellas en el momento en el que debieron dejar sus hogares. "En ocasiones lo que ocurre con este tipo de informaciones sobre desplazados es que se deshumanizan y a las personas se les arrebata su individualidad. En cambio, con esta serie lo que quiero es rehumanizarlos a todos ellos y que cuenten sus experiencias".
Los testimonios que ofrece van desde la pequeña May, de apenas ocho años, y actualmente en el campo de refugiados de Domiz, en Kurdistán, quien al dejar Irak "lo más importante que pudo llevarse fueron unas pulseras", al africano Benjamin, quien dice que ahora "su vida" es una máquina de coser, con la que puede comprar comida para su familia.
En otro caso, Alia, una iraquí de 24 años ciega y en silla de ruedas, cuenta que lo más importante que se pudo llevar es su "propia alma" porque la silla de ruedas la considera una extensión de su propio cuerpo y no un objeto.
Para Omar lo mejor que podía ir con él es su "buzuq", un instrumento musical que le aligera las penas, mientras que el tuareg Omar Ag Chakude no podría soportar la idea de dejar abandonada la tienda tradicional de su tribu, realizada con pieles de animales.
Leila, de nueve años, solo cuenta con unos pantalones con una flor, lo que para ella es perfecto porque le encantan las flores, y, en cambio, a Ahmed, de 70 años, aquello que le permitió hacer una larga travesía desde Iraq a Kurdistán es su bastón. Una motocicleta, un par de burros, una mona o un carné de identidad son otros objetos y animales que para algunos de los fotografiados fueron vitales en su momento para proseguir su día a día en unas circunstancias muy difíciles.
Brian Sokol indica que con cada uno de estos testimonios no quería únicamente conformar un "proyecto narrativo y estético, sino que también quería conocer los valores de las personas en función de su edad o de su sexo y comprobar si había un hilo conductor".
La exposición, que podrá verse hasta el día 8 de febrero de 2015, se complementa con un ciclo de cine y conferencias, con la participación, entre otros, de los periodistas John Carlin o Gervasio Sánchez.