Día de Galicia
El 25 de julio es el día del Apóstol Santiago y cada año marca su comienzo con sus tradicionales fuegos.
A las 00:00 de este 25 de julio, día del Apóstol Santiago, lucen en el cielo unas lamparillas blancas y azules desde distintos puntos de Santiago de Compostela. Ya es el Día Nacional de Galicia.
Sus orígenes se remontan a principios del siglo pasado, en 1919, cuando se reunía en Santiago de Compostela la Asemblea de las Irmandades da Fala y acordaban pactar el 25 de julio del año siguiente como el día de Galicia. As Irmandades da Fala fue una organización nacionalista gallega que impulsó muy activamente el uso generalizado del gallego en todos los ámbitos sociales y culturales. Creyeron preciso celebrar un día para ensalzar la identidad gallega.
Instaurar una tradición no es fácil, por ello, hasta mediados de los años 20, el día no se celebró de forma general en toda la comunidad. Fue terminando la década cuando incluso en los centros de emigración gallega en países de Latinoamérica ya comenzaron también a festejar esta cita cultural.
El 25 de julio llegó a ser, además, una fiesta oficial en toda España durante la dictadura franquista. Bajo el nombre de ‘Día del Patrón de España’, se celebraba este día desde un punto de vista completamente religioso y apartando siempre, en Galicia, cualquier festejo que pusiese el foco en la exaltación de la comunidad. No obstante, y a pesar de la represión, cada año se celebraban actos clandestinos para ensalzar el sentir gallego.
Con el fin de la dictadura y ya una vez entrada la transición, en 1978 se constituye el Gobierno preautonómico en Galicia y su presidente impulsa un acuerdo para hacer oficial el 25 de julio como ‘Día Nacional de Galicia’.
Las fiestas del Apóstol, como se las conoce, duran aproximadamente dos semanas. Este año comenzaron el viernes 19 y culminarán el 31 (quedando en medio el Día de Galicia), con los conocidos por los compostelanos como “fuegos pequeños”, un espectáculo pirotécnico de menor escala que el de la noche del 24 que da paso al día de Galicia, el 25.
Las atracciones en la Alameda y los fuegos de la noche del 24 y del 31 son los principales y más conocidos atractivos de estas fiestas. No obstante, la programación es de lo más variada, contando con distintas citas orquestales y de verbena por las noches o conciertos en la Praza da Quintana, como el de Mercedes Peón o el grupo Dakidarría.
Además de encuentros musicales, son ya un clásico de las fiestas del Apóstol las alboradas, que consisten en desfiles de agrupaciones tradicionales gallegas por distintas zonas de Santiago. La Feira do Vestir, el Torneo da Chave, el Día do Traxe o la Comparsa de Cabezudos son otros encuentros tradicionales y únicos que cada año sorprenden a visitantes o peregrinos que cuadran con las fiestas y que hacen disfrutar a los compostelanos de todas las edades.
El espectáculo pirotécnico es de lo más impactante de las fiestas del Apóstol y desde la pandemia se ha mantenido que no se tiren desde la Praza del Obradoiro. Así, la noche del 24, la de los "fuegos grandes", se lanzan de forma sincronizada desde varios puntos distintos de la ciudad, de manera que no se forman aglomeraciones en ningún espacio concreto. La Alameda, el parque de Carlomagno y la Cidade da Cultura son los puntos desde donde se tiran este año.
Mientras, los "fuegos pequeños" del 31 de julio se tiran solo desde la Alameda. Será entonces cuando se ponga fin a la semana más grande y bonita para los compostelanos y los gallegos.
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