UN RECORRIDO POR EL ARTE MÁS INNOVADOR
Los príncipes, que comenzaban la visita acompañados por un sinfín de curiosos, se han acercado en primer lugar a una de las obras más caras de esta edición. Se trata de uno de los cuadros pertenencientes al recién fallecido, Antonio Tàpies
Y si el origen del recorrido ha tenido como protagonista al artista catalán, el final no podía ser menos. Don Felipe y Doña Letizia concluían el itinerario con otra de sus obras, aunque en esta ocasión era el hijo del artista el que se la mostraba.
Explicaba que se trata de una obra muy espiritual, quizás porque su padre ya sentía que su muerte estaba cerca.
En el 'stand' de Soledad Lorenzo se ha producido una de las anécdotas de la jornada cuando un espontáneo ha vitoreado la figura de su majestad el rey gritando,“¡Viva tu viejo!”, a lo que el príncipe ha respondido con una sonrisa.
Otro de los atractivos de ARCO es el proyecto de los Países Bajos, invitado de honor en esta edición, y por el que también han pasado.
Casi al final de la visita, los príncipes han saludado a Elena Ochoa, fundadora y directora de la galería Ivorypress, donde se han visto cosas tan curiosas como un conjunto de instrumentos literalmente derretidos
Adonde no se han acercado ha sido a la obra más fotografiada de la exposición: 'Always Franco' presenta la figura del dictador dentro de una máquina de refrescos.