MIGUEL RÍOS OFRECE UN CONCIERTO EN LA PRISIÓN
El rock ha entrado hoy en la cárcel, pero también se cuela entre rejas el flamenco, e incluso la ópera. Acordes que animan y conmueven a cerca de 300 curtidos reclusos.
La música es aquí más que nunca una evasión. "Es una forma de desconectar, de salir en cierto modo a la calle, un subidón de adrenalina que te evade de todo esto", coinciden en señalar casi todos los reclusos que asisten al recital.
El rockero Miguel Ríos, el cantaor José Menese y el tenor Aquiles Machado a través de la fundación del Teatro Real de Madrid han ofrecido su sonora ráfaga de libertad a un auditorio de gustos dispares. La música, al menos, hará más llevadera la espera.