HABÍA SIDO CONDENADO A CUATRO AÑOS DE CÁRCEL
Murray fue declarado culpable en 2011 de homicidio involuntario por la muerte de Jackson, en junio de 2009, después de recibir una dosis letal de propofol, medicina que Murray estaba dando a Jackson como una ayuda para dormir.
Murray fue condenado a cuatro años de cárcel, pero su buena conducta y un cambio en la ley de California permitió que el acusado esté en libertad antes de haber cumplido dos años. La pena se cumplía en noviembre de 2015.