Madonna
Asus 65 años, la artista repetirá mañana en la ciudad condal. Las entradas de su primer concierto se agotaron en cuanto se pusieron a la venta.
La reina del pop aterriza en España arrasando con todo. Madonna vuelve a nuestro país con una nueva gira donde actuará este miércoles y este jueves en el Palau Sant Jordi de Barcelona. El motivo de la segunda fecha era predecible: las entradas de su primer concierto se agotaron en cuanto se pusieron a la venta.
Madonna tiene 65 años y tuvo que cancelar su gira debido a un virus, pero la reina del pop quiere demostrar que está en plena forma y así lo demuestra en el escenario. Vestida de cowboy y con ágiles pasos de baile, la reina del pop brilla y hace temblar el escenario. También sola ante su público con vestidos de clara referencia a canciones míticas como 'Like a virgin'.
Provocadora, enérgica e imprescindible casi desde sus inicios, Madonna nos recuerda que con 65 veranos, la edad no parece un problema. Pese a tantos años encima del escenario, la reina del pop sigue reinventándose, llenando estadios y agotando entradas, como ha vuelto a pasar en esta ocasión.
Madonna tuvo que ingresar en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) debido a una "infección bacteriana grave" cuando tenía prevista su gira durante el pasado verano. "El sábado 24 de junio, Madonna desarrolló una infección bacteriana grave que hizo que estuviera ingresada varios días en la UCI. Su salud mejora, pero todavía está bajo cuidado médico. Se espera que se recupere totalmente", se escribió en un comunicado difundido en su cuenta de Instagram.
Este hecho obligó a la artista a posponer su gira, que iba a comenzar el 15 de julio en Vancouver (Canadá), tal y como había anunciado el pasado 17 de enero con un vídeo en el que hacía un guiño a su película 'Truth or dare' (1991) y que también iba a llegar a España. "En este momento necesita una pausa en todos sus compromisos -explicó su representante-, lo que incluye el tour".
Ahora, después de esta pausa, Madonna vuelve más fuerte que nunca para hacer vibrar a unos fans que la reciben, incluso, con más ganas que antes.