TODO UN ESPECTÁCULO MÁS ALLÁ DEL DEPORTE
Descendieron de un platillo. Era el inicio de su actuación más multitudinaria. Y quizás tanta atención logró atenazar su habitual energía sobre los escenarios. Eso y que sus voces en directo y los problemas de sonido no ayudaron demasiado.
Para compensar cientos de bailarines. Compusieron una impresionante coreografía en la que no faltaron trajes psicodélicos.La guitarra de Slash, ex de los Guns and Roses, amortiguó en parte el desaguisado de los Black Eyed Peas. Sin duda el que más emoción y energía puso fue Usher que volvió a dar una lección de ritmo y voz.
Algo que no le hubiese venido nada mal a Christina Aguilera. A ella le tocó interpretar el himno nacional de Estados Unidos. 'Era un sueño que tenía desde los siete años' , había dicho días antes. Pero más bien fue una pesadilla. La artista se olvidó de una frase y cambió algunas palabras. El resultado.... tremendo abucheo. Después de lo escuchado quizás alguno pensaría que merecía más la pena la parodia del desaparecido Leslie Nielsen. Al menos hacía reir.