Estrenos de cine
La actriz estrena este viernes 4 de noviembre 'No mires a los ojos', una película que adapta una novela de Juan José Millás y en la que se habla de soledad, familia o aislamiento social. En estos tiempos de guerra en Ucrania, incertidumbre o subida imparable de precios, hemos querido comprobar si Leonor Watling es de las personas que ven la botella medio llena o medio vacía. Además del cine, los libros o la música, hemos descubierto que su madre es uno de sus grandes referentes y pilares ante la adversidad.
Su voz tiene algo hipnotizante. En pocos minutos igual te habla de su madre -y se le ilumina la cara-, como de un famoso psicólogo estadounidense o del cantante Beck. Y todo, con un suave torrente de voz aterciopelada y profunda. Poco se habla de la voz de Leonor Watling más allá de Marlango, su grupo de música.
La actriz y cantante lleva una jornada intensa de promoción de la película 'No mires a los ojos', una adaptación de la novela 'Desde la sombra', de Juan José Millás , que el director Félix Viscarret lleva al cine. Cuando le avisamos que esta entrevista es un poco distinta, que quizá le pille desprevenida, ella sonríe y casi lo agradece. Le gustan los retos, nos asegura. Allá vamos.
-PREGUNTA: ¿Sueles ver labotella medio llena o medio vacía?
-RESPUESTA: Depende mucho del día, del tiempo o de cómo esté yo (se ríe ante su indefinición). Hay días en los que me supera todo, y me parece todo inútil.
-P: Nos pasa un poco a todos...
-R: Sí, y en muchos casos lo que me ayuda es pensar en la Historia. Así, por ejemplo, cuando viene mi hijo y me dice mirando algo de la actualidad '¡Es terrible!', porque los niños no tienen pasado y a veces viendo las noticias piensan que se va a acabar el mundo, o dice '¡estamos en el peor momento!'. Entonces yo le matizo: 'Hombre, cuando tu abuela nació, no había acabado la II Guerra Mundial. Además pasó la Guerra Fría en la adolescencia. ¡Eso era miedo de verdad! Antes la gente se construía bunkers. A la abuela le tocó vivir la crisis del petróleo, la crisis de los misiles de Cuba...' Siempre hemos tenido cosas espantosas y maravillosas a la vez. Ahora estamos en una época de sobreinformación que, por un lado es maravillosa, pero por otro lado llega un momento en el que tienes que parar y decir no puedo con tanto. Soy solo una persona. Como dice Steven Pinker (psicólogo experimental estadounidense y popular escritor), estamos mucho mejor porque ahora nos importa que se muera una persona en Afganistán . Eso hace doscientos años no se te pasaba por la cabeza,. Pero al mismo tiempo eso hace que a veces sintamos que tenemos demasiado peso encima.
-P: ¿Y qué hacer entonces?
-R. A veces hay que apagar un poco el cerebro y sentirse un poco hippy, en el sentido de si te preocupas te mueres, y si no te preocupas te mueres también. Así que mejor entonces no preocuparte.
-P: ¿Cómo dirías que está tu vida y tu carrera ahora?¿Medio llena o medio vacía?
-R: (Sin dudarlo) ¡Medio llena!¡Tres cuartos llena! (dice mientras se ríe con complicidad).
-P: ¿En qué crees que puede ayudar al espectador tu nueva película?
-R: No tengo muy claro si las películas ayudan. A mí, a título personal, sí que me ayudan. También mucho la música y los libros. Esta película en concreto tiene una parte preciosa que es la compasión con la que mira Juan José Millás (el autor de la novela "Desde la sombra", en la que se basa la película) y con la que mira el director Félix Viscarret a todos los personajes. A todos les entiendes y con todos te puedes identificar, que es lo divertido y lo inquietante, porque dices 'me encantaría hacer esto', pero luego piensas 'no, no'. Si entiendes mejor a los personajes puedes entenderte mejor a ti.
-P: Esta película está basada en un libro de Millás, su título se refiere a una canción del grupo Golpes Bajos "No mires a los ojos de la gente". Y me acabas de decir que la música y los libros te ayudan mucho, ¿qué canciones y libros te ayudan en un mal día?
-R: Hay un disco de Beck que se llama 'Morning Phase' que me hace muchísimo bien, me cura. Cuando estoy mal, o tengo miedo, me pongo ese disco y ¡fiuuuuhhhh! (expira hondo). Y para venirse arriba me encanta Ella Fitzgerald. Soy más de ese rollo de Frank Sinatra (chasquea los dedos y sonríe) o Sammy Davis jr.
-P: ¿Y libros?
-R: Me gusta Millás, me gusta mucho Murakami... Me gustan muchos los autores que tienen la capacidad de convertir lo más prosaico y cotidiano en algo mágico. Y luego, como te contaba antes, los libros de Historia. Leer libros de Historia creo que es maravilloso porque te hace ver que somos "retrasados" desde hace mucho tiempo (se ríe). Y, pese a eso, al final vamos avanzando, vamos diez pasos para atrás pero once para adelante.
-P: ¿De qué crees que estamos muy necesitados estos días?
-R: Yo te diría de sentido común pero, claro, si oyes a la gente hablar, la gente usa mucho la expresión 'un poco de sentido común'. Luego ves lo que dice esa misma gente y piensas 'no tenemos el mismo sentido común, ¡imposible!. Necesitamos también sentido del humor, un poco de relatividad también y generosidad. Hay gente mucho peor que nosotros.
-P: ¿Qué le dirías a la gente cuando la vida se le pone un poco cuesta arriba?
-R: Que vaya a ver a un profesional, sin ninguna duda. Igual que vas al médico cuando te duele la garganta, si te duele la vida hay una profesión que se dedica a ayudarte.
-P: Por último, ahora que no nos oye nadie, dígame alguna buena acción reciente de la que se sienta orgullosa.
-R: Aquí tengo muy buena maestra, porque mi madre tiene algo, que luego he escuchado en otros muchos sitios, y es pensamiento que comparto y es 'Si haces a alguien sonreír ya has hecho una buena acción', aunque no conozcas a la persona. Mi madre es muy buena escuela. Un día recuerdo que no fuimos a comprar una cosa. Y la chica que nos estaba atendiendo estaba super nerviosa y mi madre le preguntó: '¿Estás bien?'. Y la chica respondió: 'Es que me han atracado en el metro esta mañana y me han tirado del bolso'. Y va mi madre, al salir, se acerca a una floristería y le lleva un ramo a la dependienta y le dice: 'Igual que te han hecho daño, yo te hago un regalo sin ninguna razón'. Yo me he criado con eso. Así que tengo fácil el saber cómo ayudar.