SEVILLA | 18ª DE LA FERIA DE ABRIL
Rafael Rubio 'Rafaelillo' toreó en la última de la Feria de Sevilla, un Miura. La excepción de la regla, un animal noble, sin renunciar a su procedencia, pero noble, con el que el matador murciano disfrutó como hacía tiempo, y con el aliento y la complacencia de la amable Maestranza. Lástima que se chocó con aquél al entrar a matar. Pinchó y mató muy contrario a la segunda.
Su primero, segundo de la tarde, fue un Miura con todas las letras. Un 'tío' de seiscientostreintaypico, de kilos. Altón, áspero sin ser violento hasta que desarrolló. Formidable enemigo que se econtró, sin embargo, con un especialista de dilatada experiencia con este hierro, que ha forjado su carrera con las ganaderías más duras. Pelea a ley de Rafaelillo, que además lo mató de inverosímil volapie, dada la diferencia de tamaño de uno y otro. Un tío el menudo torero murciano.
José Luis Moreno sale ileso de Sevilla después de matar dos 'miuras'. Esa es la mejor noticia tras una tarde que fue un trago para el torero cordobés, un profesional que lleva unos años tragando con corridas muy alejadas de su concepto. Ese cuarto toro le cogió feamente por una axila y lo encunó violentamente primero. Al entrar a matar lo prendió de la talegilla, lo lanzó por los aires y lo tuvo a merced durante unos interminables segundos.
Antes, Moreno lo había intentado todo, por ambos pitones, firme sin tomarse ventaja alguna.El que abría plaza fue también toro imposible. Cierta nobleza, pero con todas las complicaciones propias de esta mítica y, a veces, un punto anacrónica ganadería. La cara alta, marcando su camino, embistiendo a su son, un regalo. José Luis bastante tuvo con ponerse delante y matarlo con habilidad.
Serafín Marín vio como le devolvían su primer Miura, y pechó con un sobrero del Conde de la Maza que fue una alimaña. Dando frenazos, la cara siempre arriba, cortando el viaje, avisando y acordándose. El torero catalán se fajó en una pelea imposible, a años luz también de su concepto, pero sin perder la cara. Aprovechó Serafín cada primer muletazo por el pitón izquierdo, 'oasis' de de la árida condición del De la Maza.
El sexto de la tarde, tampoco dejó estar a Serafín. Este sí de la ganadería titular, con todas sus complicaciones, pero sin violencia y un cierto dejar estar. Probó en algún instante el de Moncada a torear sin resultado. Pero pudo estar delante, al fin.
FICHA DEL FESTEJO
Se lidiaron cinco toros de Miura, de grandes esqueletos y juego desigual. Primero y segundo no pasaron de sosos. Cuarto y sexto, parados y a la defensiva. El que más se dejó, por el pitón izquierdo, fue el quinto. El tercero fue un sobrero del Conde de la Maza, muy complicado.
José Luis Moreno: Ovación en ambos.
Rafaelillo: Ovación y vuelta tras aviso.
Serafín Marín: silencio en ambos.