NUEVO 'ATAQUE' EN MADRID
Una manta de más de tres metros de largo ha cubierto la 'Mujer con Espejo' de Botero, una de las estatuas más emblemáticas de Madrid y situada en la plaza de Colón.
La iniciativa surgió en 2005 en un pequeño pueblo de Texas cuando varias mujeres decidieron esconder aquello que no les gustaba de sus calles bajo trajes tejidos a ganchillo.
Desde entonces, fundas de mil colores han cubierto coches, autobuses y estatuas alrededor del mundo. Acciones que también han aparecido en varias ciudades españolas.
"Reinvindicamos una ciudad más bonita y llena de color, es un arte callejero", asegura una de sus integrantes. Con ese objetivo, estas mujeres han estado casi dos meses tejiendo estos vistosos cuadrados. Para todas ellas, el ganchillo es más que una afición, es una terapia.
El traje multicolor que viste a la mujer desnuda ha sorprendido a los más madrugadores, que no han dudado en inmortalizar la estampa. La 'guerrilla de ganchillo' espera que su obra de arte dure mucho tiempo: "Queremos que la pueda ver un mayor número de personas y si alguien se la lleva que sea porque realmente la necesita".