Muere a los 81 años el cineasta alemán Wolfgang Petersen, director de 'Air Force One', 'Troya' y 'La línea de fuego'

Dirigió algunas de las películas más vistas en su época en Estados Unidos, y se logró grabar un nombre en la industria de Hollywood. El cineasta alemán Wolfgang Petersen ha fallecido a los 81 años tras un cáncer de páncreas que le complicó seriamente la salud en los últimos tiempos y del cual era casi imposible curarle. El director ha muerto en compañía de su esposa en su residencia oficial de Los Ángeles, donde vivió gran parte de su vida.

Petersen, nacido en 1941, obtuvo un gran reconocimiento a nivel internacional con la película 'El submarino' (1981), tras varios años dirigiendo largometrajes en Alemania, y con la que saltó a la fama mundial. Posteriormente, dirigió películas como 'La historia interminable' (1984), 'En la línea de fuego' (1993), 'Air Force One' (1997), 'La tormenta perfecta' (2000), 'Troya' (2004) o 'Poseidón', que sería su penúltima película, en el año 2006.

No sería hasta una década después, en el año 2016, cuando volvió para dirigir la película 'Vier gegen die bank', rodada íntegramente en alemán, y que sería su último trabajo como director, realizado en la tierra que le vio nacer. Tras su retirada de la industria cinematográfica, poco o nada se supo de él hasta que este martes se comunicaba su fallecimiento. Aunque Petersen murió el pasado 12 de agosto, la familia no ha hecho pública la información hasta ahora.

Medio siglo de carrera sin exponer su vida personal

Wolfgang Petersen, que se mantuvo activo en el mundo del cine durante 49 años de su vida (desde 1967 hasta 2016), tuvo dos matrimonios. El primero solo duraría ocho años, cuando estuvo casado con

Úrsula Sieg, entre los años 1970 y 1978. Fue ese mismo año cuando contrajo segundas nupcias con la que fue su segunda esposa, y con la que estuvo casado hasta el día de su muerte, María Borgel, treinta años más joven que él.

A pesar de ser uno de los directores más aclamados del Hollywood de los años 80 y 90, no se conoció ningún escándalo o detalle de su vida personal. El director hizo su trabajo detrás de las cámaras, dejando que solamente salieran los actores delante de ellas. Pero su nombre ha quedado grabado también en las pantallas de cine y en la historia de la industria cinematográfica, que llora la pérdida de un hombre que es considerado uno de los grandes referentes en Hollywood.