FRANCIA Y AUSTRIA SON LOS PRINCIPALES DESTINOS
Cocinan su futuro fuera de España. Javier lleva entre pucheros desde los 16 años. Es uno de los 1.500 candidatos que lucha por conseguir uno de los 300 puestos de trabajo que se ofrecen en el Reino Unido. "Es la única salida que veo. Aquí te ofrecen trabajar 40 o 50 horas a la semana por 800 euros", nos dice Javier Lafuente.
Austria también busca camareros y cocineros, nada menos que 5.000. También Francia y Alemania. Nuestros profesionales destacan por encima de otros por su destreza en la manipulación de alimentos frescos pero también por otras cualidades.
"Valoran mucho su capacidad de dirección, su capacidad de formar grupo. Y también el buen ambiente que suelen crear en el trabajo", nos dice Marianela Olivares, directora de Recursos Humanos.
Pero hay otros que también piensan en poder marcharse fuera. Por ejemplo, los 10 alumnos más relevantes de las principales escuelas de cocina de España. Hoy compiten por saber cuál es el más brillante.
En el jurado, Martín Berasategui. Él lo tiene claro: para un buen chef no hay crisis. "Estos chavales tienen el trabajo asegurado en muchísimos sitios. Mi profesión no tiene fronteras pero mi cocina tiene raíces".
Dos mil euros es el salario medio que recibe un cocinero en Europa. Un atractivo estímulo para estos jóvenes. "Aprender las diferentes gastronomías de otros sitios y los idiomas", dice una alumna. "De momento no tengo novia, así que no hay nada que me ate aquí", dice otro alumno.
Solomillo de ternera con judías verdes a la lyonnaise, ajo confitado y salsa bordelaise. Ése es el plato que hoy tienen que elaborar. Un menú que podría convertirse en un jugoso pasaporte.