Vuelta al mundo
Un documento traducido por primera vez al español demuestra que Juan Sebastián Elcano impuso su criterio para decidir la ruta con la que dio la primera vuelta al mundo, por encima del rumbo defendido por dos de sus hombres de confianza, el piloto griego Francisco de Albo y el maestre Miguel de Rodas.
Uno de los traductores del documento, Tomás Mazón, ha explicado que Elcano, "sin mal rollo" con sus oficiales, hizo que prevaleciera su criterio porque entendió el ciclo de los vientos monzones, que no le eran favorables a la ruta que defendían Albo y Rodas por Malaca, la actual Malasia, y que pertenecía a Portugal, lo que al final resultó "determinante". Elcano también descartó volver a España bordeando territorios portugueses porque temía ser apresado, ha añadido Mazón, que tradujo el documento junto a Braulio Vázquez Campos, del Archivo General de Indias de Sevilla, y a Cristóbal Bernal Chacón, experto en paleografía y en la historia de la expedición.
Elcano descartó volver a España bordeando territorios portugueses
"Desde ahora, la historia de la expedición no podrá ser contada sin tener presente este documento", que recoge el interrogatorio de los portugueses a dos españoles que se habían escondido en la selva, ha recordado Mazón. El grumete Martín de Ayamonte, uno de los detenidos por los portugueses, se escondió porque quería volver a España con otro de los barcos de la expedición, el "Trinidad", que intentó hacerlo sin éxito por el este, y el por temor a naufragar en la navegación por el oeste prevista por el Elcano.
Además de la ruta decidida por Elcano, el documento confirma otros datos de la expedición: que Fernando Magallanes tenía un pariente embarcado llamado Martín de Magallanes y que el capitán general sabía de la existencia de una armada portuguesa que se dirigía a la India, motivo por el que "quizás" esperaron 41 días en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). También se revela por primera vez la avería que sufría la "Trinidad": "la quilla quebrada y un agujero grande junto a la quilla"; y el origen de dos de los capitanes de las cinco naves que zarparon desde Sevilla hace 500 años: Juan Serrano, de Fregenal de la Sierra (Badajoz), y Juan de Cartagena, "caballero de Burgos".
Además, se confirma que la nao Victoria, capitaneada por Elcano, cuando partió de regreso a España desde Timor, y con medio mundo por delante, necesitaba dar "a la bomba (de achique) doce veces de día y doce veces de noche". El documento se denomina "Auto de las preguntas que se hicieron a dos españoles que llegaron a la fortaleza de Malaca venidos de Timor en compañía de Álvaro Juzarte, capitán de un junco", que Mazón localizó por internet en el Archivo Nacional Torre do Tombo (Lisboa) cuando buscaba información de Magallanes.
El texto fue descubierto y transcrito en 1933 por el historiador portugués António Baião, y también más tarde por Neves Águas en 1986, aunque ha pasado desapercibido para la historiografía hasta ahora como la fuente "indispensable que es", lo que Mazón, de profesión ingeniero y apasionado de la historia, considera un "misterio". Hasta ahora, se sabía por la "Relación de Fallecidos" que el 5 de febrero de 1522 huyeron de la nao Victoria "sin ser sentidos" el grumete Martín de Ayamonte y el hombre de armas Bartolomé de Saldaña, en la isla de Timor.
Sin embargo, el documento traducido cuenta que ambos, poco tiempo después, fueron encontrados allí por un navío portugués y trasladados a la fortaleza de Malaca (actual Malasia), donde Martín de Ayamonte fue interrogado sobre el modo en que había llegado hasta Timor. Su testimonio, tomado el 1 de junio de 1522, fue redactado en portugués por un escribano, y terminó más tarde en Lisboa. "El maestre y el piloto, que eran griegos, quisieron venir por Malaca, y el capitán, que era vizcaíno (sinónimo de vasco), no quiso, y su intención de ellos era, según el dicho Martín, ir a las islas de Maldiva para corregir (arreglar) su nao, y de allí irían su camino para esas partes. Y más no dice", concluye el documento.