ES LA XXII EDICIÓN DE ESTE CERTAMEN
Colas kilométricas y largas esperas de hasta 3 horas para poder acceder a la feria de Barcelona donde estos días se celebra el Salón del Manga. Todas las entradas que se han puesto a la venta se han agotado.
Se espera que asistan más de 140.000 personas. La cita se ha convertido en una de la más importante del mundo, fuera de Japón.
La mayor parte de los asistentes acuden a la cita vestidos de sus personajes favoritos, quizá para participar en el juego de disfraces llamado 'cosplay'. Una de las elecciones más recurrentes este año ha sido la de Pikachu, el famoso Pokémon amarillo que este año celebra su 20 aniversario. Precisamente, una de las presencias más destacadas de este sábado ha sido la de los creadores del manga de esta saga, Hidenori Kusaka y Satoshi Yamamoto.
Nintendo, patrocinador del evento por tercer año consecutivo, recibirá en su espacio a los protagonistas del célebre videojuego 'Yo-Kai Watch'.
Más allá de las citas relacionadas con el manga y el anime, dentro del recinto ferial también se han reunido numerosos grupos de personas en el espacio 'El espíritu del Japón', donde se realizan talleres y exposiciones sobre macrobiótica, japonismo, kimonos, pinturas, mandalas y juegos tradicionales, entre otros.
Para los más nostálgicos , también se ha habilitado un rincón en el que juegan con una consola actual, pero que recrea un modelo de los años 80.
El certamen ha ampliado por quinto año consecutivo su superficie, que ya asciende a 70.000 metros cuadrados, una dinámica alcista que hizo que en un primer momento la organización pidiera el traslado al recinto Gran Vía de Fira de Barcelona, en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona).
El incremento de metros cuadrados ha ido acompañado de un aumento de los expositores, que en esta ocasión serán 188, un 10 % más que el año anterior. Los organizadores prevén alcanzar en esta edición los 140.00 visitantes, con lo que se rebasaría la cifra de 137.000 conseguida en 2015