Día de la Juventud
El Día Internacional de la Juventud se celebra cada año el 12 de agosto desde que la ONU lo estableció en el año 1999. Hoy te vamos a desvelar los orígenes de esta celebración y cuál es el papel de los jóvenes en la sociedad actual.
El Día de la Juventud en España y en todo el mundo se conmemora cada año el día 12 de agosto. Con la celebración de esta jornada, se busca concienciar a la sociedad a nivel internacional sobre los problemas que tiene la juventud hoy en día y sobre la importancia que tienen los jóvenes para ayudarnos a crecer en el mundo actual.
Cada año, para conmemorar el Día Internacional de la Juventud se celebran diversos eventos por todo el mundo. Desde programas de radio pasando por debates, campañas en redes sociales o conferencias centran las celebraciones y buscan convertir a los jóvenes en los auténticos protagonistas de este día, al mismo tiempo que se intenta que la sociedad en general conozca y comprenda las necesidades del público más joven.
Los orígenes del Día de la Juventud
La juventud siempre ha sido un campo de acción muy importante para la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Antes de que se proclamara el Día Internacional de de la Juventud, desde la ONU ya se llevaban años haciendo hincapié en la importancia que esta tiene en las sociedades de todo el mundo. De hecho, las Asambleas Generales de 1965 y de 1975 ya destacaron la necesidad de centrarse en tres ámbitos relacionados con la juventud: participación, desarrollo y paz. El año 1985 fue designado como el Año Internacional de la Juventud.
Gracias a todos estos precedentes, la Asamblea General de las Naciones Unidas del 17 de diciembre de 1999, en su resolución 54/120, declaró de forma oficial que el 12 de agosto sería el Día Internacional de la Juventud.
La ONU busca que se reconozca la importancia que la juventud puede tener como fuerza positiva de desarrollo siempre que se le den las oportunidades necesarias para crecer. En este Día Internacional de la Juventud es imprescindible tomar conciencia sobre la necesidad de proporcionarles formación y opciones para acceder al mercado laboral. Se espera que para el año 2030 la población joven suponga un 7% de la población mundial, alcanzando unos 13000 millones de personas. Por eso, las instituciones y organizaciones de todos los países deben hacer un esfuerzo y pensar en ellos a la hora de establecer nuevas políticas.