Toledo
Actualmente, se conocen dos duplicados de este texto, conservados en clavos de fundación. Y uno de ellos está en el Museo Sefardí de Toledo.
El investigador de la Universidad de Granada Daniel Sánchez Muñoz ha descubierto una nueva inscripción real en lengua sumeria escrita mediante el sistema de notación cuneiforme. Este hallazgo se ha realizado al estudiar un manuscrito en el Museo Sefardí de Toledo.
El texto de esta inscripción cuneiforme presenta uno de los sistemas de escritura más antiguos de la historia. Este se debe de contextualizar en Mesopotamia entre los siglos XX-XVIII. En esta época, múltiples reinos luchaban por la hegemonía en el sur de Mesopotamia tras la desintegración del estado de los reyes de la Tercera Dinastía de Ur.
Actualmente, se conocen dos duplicados de este texto, conservados en clavos de fundación. Estos son conos de arcilla encajados en las paredes de los templos o capillas que conmemoraban a su constructor o restaurador y a quien vivía allí.
Uno de esos manuscritos se halla en el Museo Sefardí de Toledo y dice lo siguiente: "Para Annunitum de Acadé, su señora, Enlil-bani, el pastor de todo lo existente en Nippur, el rey fuerte, el rey de Isin, el rey de Súmer y Acad, el marido, elegido de todo corazón, de Inana, le construyó el Ulma, su amada residencia en el interior de Isin".
El investigador Sánchez Muñoz ha apuntado que "este simple y breve texto nos puede recordar al de cualquier placa actual conmemorando la reforma o construcción de un edificio. Sin embargo, resulta excepcional, entre otras, por dos razones".
Estas son que "nos encontramos ante el testimonio más relevante para el estudio del culto a Annunitum en la ciudad mesopotámica de Isin" y, aunque "cabía esperar un culto activo a esta diosa", "hasta ahora solo teníamos una breve alusión al rey Isme-Dagan de Isin apelando a esta diosa para nombrar a una sacerdotisa", expone Muñoz.
Enlil-bani mandó reconstruir la capilla. Este monarca accedió al trono tras un momento de inestabilidad política en el reino de Isin y afrontó no menos dificultades durante su reinado.
Entre otras cosas, tuvo que reconquistar la ciudad Nippur (la capital religiosa y cultural de Mesopotamia en aquel entonces) tras haber sido tomada por el reino rival de Larsa. En este sentido, Enlil-bani pudo (re-)construir esta capilla para no perder el favor de Annunitum en aquellos tiempos tan complicados.
Según precisa este asiriólogo e investigador contratado postdoctoral en el departamento de Historia y Ciencias de la Música de la Universidad de Granada, esto se sumaría a otras medidas que Enlil-bani adoptó para controlar su reino, incluyendo una exención de impuestos y la reedificación de una muralla defensiva.