Descubrimiento
El estudio ha sido realizado por la Universidad de Córdoba y este descubrimiento supone un avance en los conocimientos sobre la perfumería de la Antigua Roma
El equipo de investigación de la Universidad de Córdoba, liderado por el catedrático de Química Orgánica José Rafael Ruiz Arrebola, junto con el Ayuntamiento de Sevilla, ha descrito químicamente los componentes"reales" de un perfume del siglo I d.C. Un recipiente tallado en cuarzo descubierto en Carmona (Sevilla), ha sido el objeto que ha posibilitado llevar a cabo la investigación. En el estudio, publicado por la revista científica suiza 'Heritage', han participado Ruiz Arrebola, el arqueólogo municipal de Carmona, Juan Manuel Román y los investigadores de la UCO y Fernando Lafont.
Restos reales de un perfume romano
Los restos de la colonia, localizados en 2019, se habían conservado solidificados en el interior de un recipiente tallado en cuarzo, que se mantenía sellado. Según ha explicado Juan Manuel Román, se trataba de una tumba colectiva, posiblemente de una familia con un alto poder adquisitivo que poseía varios objetos relacionados con rituales funerarios. Se encontraron las urnas cinerarias de seis personas adultas: tres hombres y tres mujeres.
El frasco, clave para el descubrimiento
El recipiente fue encontrado en un pequeño frasco de cristal de roca que estaba tallado en forma de ánfora. Generalmente, los recipientes de perfume solían ser de vidrio soplado, y en pocas ocasiones eran de este tipo de material, por lo que los hacían "muy cotizados y extremadamente caros".
La mayor sorpresa fue encontrarlo "perfectamente sellado", y en su interior estaban conservados los residuos sólidos del perfume, que ha sido la clave para llevar a cabo la investigación. Ruiz Arrebola ha señalado que la dolomita (carbonato) como tapón y el betún empleado para sellarlo, ha sido lo que ha mantenido el frasco en tan buenas condiciones. Durante la investigación hallaron dos componentes del perfume: una base aglutinante que permitía la conservación de aromas y la esencia del propio perfume. La base se trata de un aceite vegetal, posiblemente aceite de oliva, aunque no lo han podido confirmar con total seguridad.
Para analizar el perfume se han empleado varias técnicas instrumentales como la difracción de rayos X o la técnica de cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas.
¿Qué supone este descubrimiento?
Los resultados químicos realizados por la Universidad de Córdoba indican que Roma olía a pachuli, un aceite que se obtiene a través de una planta de origen indio que se emplea en la perfumería actual, pero de la cual no se tenía ninguna constancia que se emplease en tiempos romanos.
Este nuevo descubrimiento supone "un hito" para el campo de la perfumería romana y sorprende la aparición del pachulí como aceite esencial. El mausoleo carmonense sigue siendo objeto de estudio y se están realizando más investigaciones. Por el momento, podemos hacernos una idea, de cómo olía el Imperio Romano.