Día del cochinillo asado
Hoy se celebra el día del cochinillo asado. Descubre el origen de este delicioso plato y la mejor manera de prepararlo en el horno.
El cochinillo o lechón asado es uno de esos platos que, con solo pensar en él, hace que se nos haga la boca agua. El hecho de que el cerdo sea joven y se haya alimentado básicamente de leche (de ahí su nombre) es lo que hace que su carne sea tan jugosa y tierna. Este hecho, sumado a su corteza crujiente tras haber pasado el tiempo suficiente en el horno, es lo que lo hace completamente irresistible.
Es un manjar muy apreciado por todo el territorio español, principalmente enNavidad. Por ello, tan cerca de estas fechas navideñas, hoy, como cada 18 de diciembre, se celebra el Día Mundial del Cochinillo Asado. Ya hemos visto como su precio ha subido en el mercado. De todas formas, cabe señalar que el reconocimiento de este suculento plato no surgió en España, sino que fueron los norteamericanos los que dieron origen a este día conmemorativo haciendo que cuadrase en vísperas de Navidad.
Un plato muy antiguo, ¿ha cambiado su receta?
Si desde el 2021 echamos la vista atrás, veremos que la preparación del cochinillo asado apenas ha cambiado a lo largo de la historia. Su origen lo encontramos en la época del Imperio Romano, cuando el cochinillo era típico entre las clases altas. Desde aquellas, su receta, que contaba con tres ingredientes básicos (agua, sal y un horno de leña para asarlo), no ha cambiado mucho.
A día de hoy, una de las variedades más fieles a la original, a la par que popular y vistosa, es el asado al estilo segoviano con su tradicional ‘corte al plato’. Este curioso corte tuvo su origen alrededor de 1930 en el ‘Mesón Cándido’ cuando, un día, el dueño del mesón no encontraba ningún cuchillo para cortar el cochinillo y se le ocurrió usar un plato para hacerlo (que luego rompería). Este gesto sorprendió a los clientes y, por ello, desde aquellas, ya convertido en ritual, se sigue practicando el ‘corte al plato’.
Cómo cocinar cochinillo al horno, ¿cuánto tiempo lleva?
Aunque, por lo general, el cochinillo es de pequeño tamaño (se recomienda entre 4 y 5 kg), puede ser que este sobrepase el espacio del horno convencional que tengas en tu casa. Por ello, una opción para cocinarlo, ahorrando tiempo y con un óptimo resultado, puede ser que lo lleves a un horno de panadería. Solo tendrás que encargarte de adobarlo a tu gusto y allí se encargarán de asarlo. Acuérdate siempre de indicar cuan hecho te gusta, aunque lo ideal es que la piel llegue a endurecerse quedando crujiente y más sabrosa.
Si, por el contrario, cuentas con un horno preparado para que tú mismo puedas encargarte de asar el cochinillo (o el cochinillo no es muy grande y cabe en un horno normal), toma nota de la receta que te ofrecemos a continuación. Necesitarás algo de tiempo, pero tú y tus invitados os chupareis los dedos con el resultado.
¿Por qué no aprovechar el propio día del cochinillo asado para rendirle tributo a este manjar? ¡Hazlo en el horno de casa y al estilo original! Solo necesitarás: sal gorda, aceite o manteca de cerdo, un ajo y algunas hierbas aromáticas (como laurel, tomillo o romero). Calcula que necesitarás entre tres y cuatro horas para cocinarlo.
1. Precalienta el horno a 160º una hora antes de meter el cochinillo.
2. Aprovecha ese tiempo para untar el interior del cochinillo con aceite o manteca de cerdo derretida que puedes aromatizar con algunos dientes de ajo prensados.
3. También debes preparar la fuente con la rejilla: echa 1-2 cm de agua en la fuente sobre la que irá la rejilla (sobre la rejilla irá el cochinillo, que no debe tocar el agua). En ella también puedes echar las hierbas aromáticas.
4. Una vez hayas salado el cochinillo por dentro y por fuera, colócalo en la rejilla con la piel hacia abajo.
5. Cuando el horno esté precalentado, mete el cochinillo y hornéalo entre 45 - 60 minutos.
6. Saca la bandeja del horno y, sin que el cochinillo se moje, dale la vuelta para que quede con la piel hacia arriba. Pínchala por varios sitios para que se evapore el agua absorbida y la piel pueda quedar crujiente.
7. Si te apetece, puedes barnizar la piel con aceite o manteca derretida para darle el toque final y mételo de nuevo en el horno durante una hora más (menos de una hora si el cochinillo es muy pequeño). Sube la temperatura a 200º y, si no está listo, déjalo unos 15-20 minutos más hasta que la piel acabe de tostarse, pero vigílalo para que no llegue a quemarse.
Ahora que ya sabes cómo hacer un cochinillo asado en casa, no tienes excusa para no celebrar este día tan delicioso. ¡Feliz día del cochinillo! ¡Buen provecho!