va a ser incinerado
La Iglesia de San Pablo, ubicada en el barrio de la Trinidad de Málaga capital, donde nació Gregorio Sánchez, más conocido como Chiquito de la Calzada, hace 85 años, ha sido el escenario al que cientos de malagueños han acudido para despedir al humorista y donde familiares, amigos y ciudadanos anónimos han podido aplaudir, por última vez, al artista.
"Chiquito de la Calzada no se va a morir en la vida, porque mientras un español siga diciendo 'Hasta luego Lucas', se seguirá recordando a nuestro querido Gregorio". Estas han sido las emotivas palabras del actor Manolo Medina, quien durante la misa funeral del humorista malagueño ha intervenido recordándolo con unas sentidas frases de afecto y agradecimiento.
Además, ha afirmado que "la risa cura y Chiquito era el que, a todos los cómicos y actores que estamos aquí hoy, nos quitaba las penas, incluso cuando él mismo estaba mal". Han sido muchos los que este domingo han querido estar presentes en un día, que el sacerdote que ha oficiado la misa ha calificado como "el triunfo definitivo de su vida".
Eran las 11.30 horas cuando el coche fúnebre ha aparecido con los restos mortales de Chiquito. Sus familiares, muy afectados, han entrado a la Iglesia seguidos de Gregorio Sánchez. Las cientos de personas que esperaban para verlo a las puertas de la Iglesia, han ovacionado al féretro del humorista a su llegada. Ovación que se ha extendido al interior del templo cristiano cuando el féretro ha cruzado la puerta de entrada.
El también humorista malagueño Manolo Sarria, ha pedido a Gregorio Sánchez "que no se olvide de nosotros, que falta nos hace, y que desde el cielo nos eche una mano", ha expresado muy emocionado. Además, ha dicho que quiere que se le recuerde siempre como alguien "muy humano".
El sentido del humor que ha caracterizado siempre a Gregorio Sánchez también lo ha acompañado durante sus últimos días, los cuales pasó ingresado en el Hospital Regional de Málaga como consecuencia de una angina de pecho. "He vivido muy de cerca sus últimos días y os puedo asegurar que en ningún momento perdió el sentido del humor", ha querido destacar Medina durante su intervención en la misa.