Galicia
Una casa rural de una pequeña población del ayuntamiento pontevedrés de Gondomar ofrece un servicio de picnic a sus clientes en el que dicen “es el mejor banco del mundo”.
José Antonio regenta una casa rural en el corazón de la sierra de Galiñeiro, en Pontevedra. En su establecimiento cuenta con varios comedores pero últimamente las peticiones de los huéspedes le llevan a trasladar su cocina hasta lo más alto. "Unos clientes me dijeron que querían cenar en un banco que hay a pocos metros de aquí, subiendo este monte, para disfrutar de las vistas", nos comenta. Y arrancó con la aventura.
El banco es público así que solo hace uso de él en ocasiones especiales y cuando sabe que nadie lo va a estar visitando. "Normalmente son comidas o cenas románticas que nos demandan las parejas", explica.
Hoy ha preparado, en una cesta de picnic, una tabla de embutidos, una pizza que ha elaborado en su horno de leña y diferentes bebidas. Poco antes de la hora de comer llegan Bárbara y Alexandre, la pareja que hoy va a comer en el que ya se conoce en la zona como el mejor banco del mundo.
Ella lleva la cesta y él coge una mesa de madera plegable que coloca frente al banco. Con lasIslas Cíes de fondo y la vista de toda la sierra, comienza una velada en la que la paz, el silencio y la desconexión son los protagonistas.
Otros bancos con encanto
Este no es el único banco para disfrutar de unas vistas espectaculares en España. En Galicia también podemos disfrutar de otros lugares con encanto como la panorámica desde los acantilados de Loiba, en Ortigueira. Desde allí se puede divisar toda la zona hasta el cabo de estaca de Bares. En Asturias, uno de los bancos más especiales está en Cudillero. Ubicado en el Mirador del Sablón, ofrece una vista única del mar Cantábrico.
En el interior, destaca el banco de Burón, en la provincia de León. Las vistas desde este pueblo, en medio de los Picos de Europa, combinan el entorno montañoso con los pequeños pueblos que aparecen dispersados por todo el paisaje.