ARTE ENTRE LAS MURALLAS
Ávila se convierte en la ciudad del arte, acogiendo un gran circo entre sus murallas medievales o palacios renacentistas.
La ciudad se transforma en una en una enorme carpa de circo donde no falta la interpretación y las acrobacias de vértigo, donde los únicos animales que tienen se desplazan en manada sobre zancos a ritmo de 'funky' y donde cualquier objeto es susceptible de convertirse en un instrumento medieval.