PRODUCTO DE LA FAMOSA BRIT SCHOOL
Con un mercado discográfico en una profunda crisis tal vez sorprenda encontrar a una joven artista que en un mes ha conseguido vender 2 millones de discos. Sus cualidades: una magnífica voz, un trabajo serio y disciplinado y un nombre artístico sencillo y fácil de recordar: Adele.
No encaja demasiado en el perfil clásico de las estrellas emergentes de la canción. No se le conocen especiales vicios y es seria, formal, disciplinada, algo tímida, y su aspecto físico contrasta con la extrema delgadez de algunas de sus excompañeras de la Brit School, una auténtica academia de talentos británica donde coincidió con la más domesticada Leona Lewis o con la autodestructiva Amy Winehouse.
Dos discos ha puesto ya en el mercado, y con '21' está batiendo records que nadie había logrado alcanzado desde la época de Los Beatles.