Animales
Los corderos de una granja de la localidad de Olmedo, en Valladolid, viven muy felices desde que su dueño les rocía de infusiones aromáticas todos los días.
El granjero asegura que, gracias a las infusiones, los animales se enferman mucho menos y no necesitan antibióticos. Además, los despierta cada mañana con música.
El pastor cultiva y recoge él mismo el tomillo, romero, eucalipto y la menta con los que realiza sus 'medicinas'. Después, prepara las infusiones y las vaporiza por toda la granja.
El método funciona y ya ha sido avalado científicamente. Sus infusiones ya están exportándose a otros países de Europa, como Alemania, Italia y Grecia.