Ballena azul
Científicos de la Universidad de Stanford, California, han logrado registrar por primera vez el latido del corazón de una ballena azul, el animal más grande del planeta.
La sorpresa ha sido que el corazón de estos enormes animales solo late dos veces por minuto.
Los investigadores colocaron un dispositivo de grabación a un ejemplar durante todo un día adherido con ventosas a la aleta izquierda del animal. Este dispositivo registró la frecuencia cardíaca del animal a través de electrodos incrustados en el centro de dos de las patas de succión.
Además, han averiguado que el corazón de estos animales ya trabaja al límite, lo que explicaría por qué las ballenas azules nunca han evolucionado para ser más grandes. Los datos también sugieren que algunas características inusuales del corazón de la ballena podrían ayudarlo a funcionar en estos extremos.