Lince ibérico

La población de lince ibérico se multiplica por 10 gracias al confinamiento y los programas de reproducción

La población de lince ibérico, una especie catalogada en peligro de extinción, se ha multiplicado por 10 en los últimos años. Gracias al confinamiento han podido expandirse y evitar atropellos. Los programas de reproducción también han ayudado.

Hace un año un largo confinamiento nos permitió dar un respiro a muchas especies animales, que se multiplicaron. Por ejemplo, el lince ibérico, que tuvo más fácil expandirse y escapar de los atropellos. Además, los programas de reproducción de este felino han ayudado a multiplicar por 10 su población. Este hecho supone todo un éxito.

La población de lince se ha multiplicado por 10 en los últimos años. Y el confinamiento, de alguna manera, ayudó. Porque, con menos circulación, menos linces atropellados, y con menos presencia humana, la población del felino creció.

Hace unos 20 años apenas había 100 linces en toda la Península Ibérica, ahora hay casi 1.000. Es un éxito en la reproducción y en la reintroducción de esta especie tan castigada, aunque no se debe bajar la guardia para seguir viendo por los montes de la península a este emblemático felino.

Hay centros que trabajan para su conservación. Por ejemplo, el de Ciudad Real funciona como una especie de hospital de linces que encuentran heridos en la naturaleza. "Por aquí pasan un tiempo, el que sea necesario y digan los veterinarios que trabajan aquí. Cuando está otra vez bien se vuelve a solar", explica Víctor Díez, director del centro Vida Silvestre.

En departamentos que simulan una pequeña habitación de hospital, tratan a linces ibéricos como Labrador. A este ejemplar, lo capturaron en una zona de la provincia de Ciudad Real y va a ser reintroducido en la naturaleza.

Animales heridos que podrían haber muerto son curados y reintroducidos. Después de tantos años avisando que podía extinguirse por fin podemos dar una buena noticia: el rey del monte crece.