NASA
La NASA sigue probando las nuevas cápsulas con las que espera volver a enviar astronautas a la Estación Espacial Internacional el año que viene.
En las últimas horas ha verificado el funcionamiento de sus sistemas de emergencia, lo que debería permitir a la tripulación separarse del cohete en caso de avería o de que surja algún problema.
La cápsula se desprendió correctamente poco después de despegar y, aunque solo se abrieron dos de sus tres paracaídas, llegó a tierra en perfecto estado.
La primera misión no tripulada se ensayará el próximo 17 de diciembre.