MENORES FUMADORES
"No - No tengo problemas - Nunca me han pedido el DNI - Siempre he aparentado un poquillo más de edad y a mí nunca me han pedido nada cuando les he ido a comprar a mis amigos tabaco y eso"...son frases que se oyen si les preguntas.
Además, según varios estudios, los fumadores de entre 16 y 24 años son los que menos interés tienen en dejar el hábito.
Una adicción, que puede restar hasta 14 años de vida a una persona que empieza a fumar durante la adolescencia...una etapa en la que todavía se crece y en la que los pulmones no han terminado de formarse.
Según explica un neumólogo: "Mientras antes se empiece a fumar...mayor riesgo de adicción. Estamos hablando de que el consumo de tabaco es una enfermedad adictiva crónica". Los propios jóvenes admiten que empezar a fumar es casi como un ritual. Imitan a sus amigos y se sienten más mayores. "Por las amigas y eso porque empiezas con la tontería y al final acabas fumando" "Vamos a echar uno..y al final te acabas enganchando".
Los expertos aseguran que todavía falta mucha educación: "Necesitamos cambiar la mentalidad, que los propios padres empiecen por educar a sus hijos en el tema de que el consumo de tabaco es algo dañino para su salud, que se desnormalice la conducta de fumar en la sociedad".
La mejor prevención sí está clara: no empezar a fumar.