HURACANES MÁS INTENSOS
La potencia y el poder destructor de los huracanes se intensifica cada año como consecuencia del cambio climático, afirma el investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), David Adams, con motivo de celebrarse este viernes el Día Mundial de la Meteorología.
"La temperatura de la superficie del mar es más caliente cada año y esa es la fuente de energía para un huracán, la liberación del vapor de agua de la superficie del mar", explicó el investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera. Adams recordó que las manifestaciones climáticas resultan cada vez más caóticas debido al cambio climático y que el aumento de la temperatura global indica que "habrá huracanes más intensos", junto a fuertes lluvias, las sequías y las olas de calor.
Sin embargo, el especialista aclaró que, en el caso de los huracanes, "se espera que sean más intensos pero no necesariamente que haya más". "No se puede decir que vaya a haber más frecuencia de huracanes, pero sequías sí se espera que vengan con más frecuencia e intensidad", agregó. Fenómenos como las olas de calor que penetran en distintas regiones a lo largo del año también serán más violentas y frecuentes. El experto valoró los efectos del cambio climático como preocupantes desde una perspectiva histórica, recordando que "nunca en la historia del planeta ha habido un cambio tan radical en tan poco tiempo", debido a que se están emitiendo cantidades ingentes de gases efecto invernadero a velocidades inauditas.
A futuro, el especialista en meteorología tropical teme que el ser humano "no sepa mantener el ritmo de cambio" que está imponiendo el calentamiento global. "Los seres humanos hemos tenido la suerte de desarrollar nuestra civilización en estas condiciones climatológicas más tranquilas", expresó. Esto se debe a que los sistemas agrícolas sufren las consecuencias de las alteraciones en los fenómenos climatológicos. Reflejo de ello es la existencia de tipos de hortalizas, verduras y frutas que solo crecen en una zona climatológica pues requieren de esas condiciones específicas para crecer. "Si los climas se van alterando puede que estas especies no se adapten genéticamente tan rápido", comentó.