Infección en los pulmones
Abrigarse del frío es fundamental en invierno. La ropa de cama de plumas es una de las formas más calientes de protegerse del frío.
Sin embargo puede ser una práctica muy peligrosa. Según publica el 'British Medical Journal', un hombre de 43 años acudió a su médico tras xperimentar durante tres meses malestar, fatiga y dificultad para respirar.
El hombre explica que se quedaba sin aliento, le costaba respirar o no podía subir escaleras. "No podía aguantar de pie o caminar más de unos minutos a la vez sin sentir que me iba a desmayar", explicó a la citada revista.
Durante una de las visitas a su médico, descubrieron que el hombre había adquirido recientemente un edredón y unas almohadas que estaban rellenos de plumas.
La forma más común de neumonitis por hipersensibilidad se llama pulmón de avifauna y un subgrupo raro de esta se conoce como pulmón nórdico de plumas (FDL). "La FDL es causada por la inhalación de polvo orgánico de plumas de pato o ganso que se encuentran en edredones y almohadas", explican Dempsey y su equipo en el informe del caso.
La historia ha tenido un final feliz. El hombre al deshacerse de su ropa de cama de plumas y un tratamiento prolongado con esteroides, pudo recuperarse.