SE CONSERVA LA RAÍZ DE UN ÁRBOL
Arqueólogos españoles han desenterrado en Egipto un jardín funerario único de casi 4.000 años de antigüedad, según informa el diario egipcio Ahram Online. El hallazgo forma parte de la 16ª campaña de excavaciones arqueológicas en la colina de Dra Abu el-Naga --en la orilla oeste de la ciudad egipcia de Luxor-- del Proyecto Djehuty, liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Los hallazgos de esta última campaña serán presentados este jueves 4 de mayo en el CSIC (Madrid) por el director del proyecto, José Manuel Galán.
El descubrimiento se realizó durante los trabajos de excavación en el área alrededor de las tumbas excavadas de la 18ª dinastía temprana de Djehuty y Hery (1500-1450 a.C.), en la necrópolis de Dra Abu el-Naga.
El jardín se encuentra en el patio abierto de una tumba excavada en la roca del Reino Medio y el diseño de las medidas del jardín es de tres metros por dos metros y se divide en cuadrados de unos 30 centímetros, según ha explicado al diario egipcio el jefe del departamento del Antiguo Egipto del Ministerio de Antigüedades de Egipto, Mahmoud Afifi. Estos cuadrados, según señala el jefe de departamento, parecen haber contenido diferentes tipos de plantas y flores.
En el centro del jardín, la misión ha localizado dos puntos elevados que se utilizaban para el cultivo de un pequeño árbol o arbusto. En una de las esquinas, las raíces y el tronco de un árbol pequeño de unos 4.000 años de edad se han conservado hasta una altura de 30 centímetros, según ha declarado. Junto a ella, se ha encontrado un recipiente que contiene dátiles secos y otras frutas, que podrían haber sido presentados como ofrendas.
"El descubrimiento del jardín puede arrojar luz sobre el medio ambiente y la jardinería en la antigua Tebas durante el Imperio Medio, alrededor del año 2000 a.C.", ha declarado el jefe del proyecto José Manuel Galán, profesor de investigación del CSIC en Madrid.
Galán ha explicado que jardines funerarios similares sólo se encontraron en las paredes de una serie de tumbas del Imperio Nuevo, donde un pequeño jardín cuadrado está representado en la entrada del monumento funerario, con un par de árboles próximos a ella. Probablemente tenía un significado simbólico y debe haber jugado un papel en los ritos funerarios.
Sin embargo, según ha afirmado Galán, estos jardines nunca han sido encontrados en la antigua Tebas y el reciente descubrimiento ofrece confirmación arqueológica de un aspecto de la cultura del antiguo Egipto y de la religión que hasta ahora sólo se conocía a través de la iconografía.
Por otra parte, el profesor del CSIC señala que cerca de la entrada de la tumba excavada en la roca del Reino Medio, una pequeña capilla de medición de adobe de 46 centímetros por 70 centímetros por 55 centímetros, fue descubierta unido a la fachada. En su interior, encontraron in situ tres estelas de la dinastía 13ª, alrededor del 1800 a.C.
Los primeros estudios revelan que el dueño de uno de ellos se llamaba Renef-Seneb, y el propietario de la segunda era "el ciudadano Khemenit, hijo de la dueña de la casa, Idenu". Este último menciona los dioses Montu, Ptah , Sokar y Osiris, tal y como ha comentado el investigador español.
"Estos descubrimientos subrayan la relevancia de la zona central de la Dra Abu el-Naga como un lugar sagrado para la realización de diversas actividades de culto durante el Reino Medio", añade Galán.