Coronavirus
El síndrome respiratorio agudo del coronavirus 2 (SARS-CoV-2) causa la enfermedad infecciosa coronavirus, que se extendió por primera vez en Wuhan, China, en diciembre de 2019. A pesar de los enormes esfuerzos para controlar la enfermedad, COVID-19, ahora se ha extendido a más de 100 países y ha causado una pandemia mundial con más de un millón de personas contagiadas por el mundo por el coronavirus.
Se cree que el SARS-CoV2 se originó en los murciélagos; sin embargo, las fuentes animales intermedias del virus son completamente desconocidas. Por lo que una investigación del Instituto de Veterinaria de Harbin, en China, señala que los hurones y los gatos son susceptibles al coronavirus. Aunque hay que matizar que ninguno de estos animales puede contagiar a los humanos.
En el estudio señalan que el coronavirus se replica mal en perros, cerdos, pollos y patos, pero eficientemente en hurones y gatos. Descubrimos que el virus se transmite en los gatos por las gotas de las vías respiratorias.
Los gatos y los perros están en contacto cercano con los humanos y, por lo tanto, es importante comprender su susceptibilidad al SARS-CoV-2 para el control del coronavirus. Primero investigaron la replica de SARS-CoV-2 en gatos. A cinco gatos domésticos de ocho meses fueron inoculados por el SARS-CoV-2 en las vías respiratorias. Al sexto día se le práctico la eutanasia, y en ambos se encontraron el ARN del virus en su tracto respiratorio, aunque no habían llegado a invadir los pulmones, señalan en el estudio.
También se probó el SARS-CoV-2 en hurones y comprobaron que el SARS-CoV-2 puede replicarse en el tracto respiratorio superior de los hurones, pero su replicación en otros órganos son indetectables.
La revista científica Nature ha publicado los resultados del estudio del coronavirus, aunque aún están pendientes del proceso de revisión. Señala parte de la investigación de Harbin diciendo que "ninguno de los gatos infectados mostró síntomas de enfermedad, y que solo uno de los tres felinos expuestos a animales infectados contrajo el virus. "Esto sugiere que el virus puede no ser altamente transmisible en los gatos", señala uno de los científicos de la investigación. Pero la revista señala que el modo de transmisión no está claro porque el estudio no describe cómo se instalaron las jaulas, y los gatos no infectados podrían haber contraído el virus de las heces u orina contaminadas.