POR PRIMERA VEZ
Parecía imposible crear esperma in vitro, en una placa en laboratorio, sin utilizar el aparato reproductor, pero los científicos chinos lo han conseguido. El proceso ha sido complejo.
El experimento comienza utilizando células madre embrionarias de ratón, que después se cultivaron para convertirlas en células germinales. Se sometieron a un tratamiento especial y eso dio lugar a espermatozoides.
Espermatozoides que consiguen fecundar con éxito los óvulos y finalmente nacen los ratones. Seis crías y todos sanos.
Muchos grupos de investigación han tratado de obtener espermatozoides artificiales. De momento, los investigadores son prudentes. El estudio, por ahora, está limitado a ratones.
Queda un largo camino para trasladarlo a humanos. Habría que salvar muchos obstáculos éticos y también técnicos. La infertilidad afecta al 15 por ciento de las parejas y un tercio de los casos es de origen masculino.