LA ACCIÓN HUMANA ESTÁ CASI SIEMPRE DETRÁS DE ESTOS FENÓMENOS

Las algas proliferan este año en las costas españolas por el cambio climático y la contaminación, según un experto

El uso de fertilizantes y el vertido de nutrientes al mar está "alimentando" a las plantas acuáticas, lo que, junto al cambio climático, explica la actual proliferación de microalgas en las costas españolas.

La contaminación, tanto por pérdidas en las redes residuales como por el deterioro de los acuíferos, junto con la acción del cambio climático, explican la actual proliferación de microalgas en las costas españolas, según ha explicado el científico del CSIC en el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEA), Gozton Basterretxea.

De este modo, el uso de fertilizantes y el vertido de nutrientes al mar está "alimentando" a las plantas acuáticas, según recoge eltiempo.es. Aunque Basterretxea reconoce que no existe un registro histórico de la presencia de las microalgas en la costa, señala que en zonas como Cataluña, donde existe un mayor control, "hay una tendencia alcista".

El científico destaca que la acción humana casi siempre está detrás de estos fenómenos, pero sus consecuencias varían, por ejemplo, en función a los tipos de masas de agua y las condiciones físicas de la costa. De este modo, cree que no es lo mismo que un alga se desarrolle en el Mediterráneo que en el Atlántico. Así, señala que en la región mediterránea es más "normal" comprobar la existencia de la superpoblación de microalgas, pues tienden a concentrarse en grandes formaciones que se distribuyen a lo largo de la costa, donde hay más nutrientes.

En el Atlántico, según apunta el experto, la gran distribución de microalgas es menos perceptible, ya que de por sí es un océano muy denso en fitoplancton y las aguas son más "oscuras". Sin embargo, para Basterretxea, el problema radica en la toxicidad que generan algunas especies de microalgas y su impacto en actividades económicas como la cría de mejillones y de bibalvos en las costas gallegas.

"En el Mediterráneo, es muy común ver largas franjas verdes en la costa que cambian a tonos más azules conforme te mueves mar adentro, en el Atlántico, esa proliferación ya existe y los problemas van más allá", ha explicado. De hecho, ha comentado que algunas toxinas de las microalgas atlánticas, aunque están bien controladas, pueden suponer problemas diarreicos, paralíticos y en algunos casos, mortales.

Asimismo, ha afirmado que los casos de problemas con microalgas se concentran en zonas locales con determinadas condiciones físicas, como calas o pequeñas ensenadas donde existe un alto índice de nutrientes derivados de escapes en los conductos en aguas residuales o aguas procedentes de acuíferos contaminados.

Basterretxea también ha comentado que los fertilizantes juegan "un gran papel" en el enriquecimiento por nitratos de los acuíferos y que, por tanto, eleva la concentración de microalgas. Es más, asegura que en Mallorca, la zona que han estudiado desde el IMEA la "excesiva" utilización de fertilizantes en la agricultura, en campos de golf o en jardinería está contaminando dichas masas de agua subterránea. En este sentido, ha añadido que los purines de los animales actúan de forma idéntica.

Causas no humanas

Igualmente, ha precisado que en zonas donde hay aguas de escorrentía o lluvias, las altas concentraciones de estos vegetales son muy comunes, pues se genera un número elevado de nutrientes. El científico del IMEA ha comentado que las altas concentraciones de microalgas pueden producir "desequilibrios" en el ecosistema de zonas muy localizadas. De hecho, ha explicado que puede causar la pérdida de oxígeno en las aguas y la muerte de grandes cantidades de peces. Finalmente, ha incidido que este problema se da en lugares como el Mediterráneo, donde existe una tendencia a una elevada biomasa.

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