Reloj
En 2023 se batió récord en los 77 años desde el nacimiento de este experimento científico, situándose en 90 segundos para el fin del mundo.
Las guerras son una de las amenazas para la humanidad, según los científicos que están detrás del Reloj del Apocalipsis, que indica cuánto falta para el fin del mundo.
El Reloj del Apocalipsis ha decidido seguir manteniendo intactas sus manecillas, situándose a 90 segundos de la medianoche o, lo que es lo mismo, para que se acabe el mundo.
Noventa segundos ha sido el peor dato de la historia, que es en el que se situó el pasado año 2023, batiendo récord en los 77 años desde el nacimiento de este experimento científico.
Esta herramienta se ideó en 1947, en Chicago, donde científicos lo fabricaron para concienciar a mandatarios y ciudadanos del peligro de las armas atómicas.
El invento funciona de tal manera que, cuanto más cerca estén las agujas de las 12, más riesgo potencial habrá de una catástrofe que acabe con los seres humanos.
El pasado 2023, el conflicto entre Ucrania y Rusia determinó que se acercara a esos 90 segundos, pero en 2024, con la actual situación bélica entre Israel y Hamás, los expertos creen que "el riesgo continúa".
El físico Lawrence Krauss, subrayó ante la CNN hace ahora un año que "ahora, el reloj se mueve en segundos, antes eran minutos... Está claro que no es una evaluación científica cuantitativa, sino más bien cualitativa. Lo que siempre fue importante es el movimiento del reloj, no su valor absoluto".
En el equipo para tomar la decisión sobre la hora que marca el reloj participa principalmente la junta de Ciencia y Seguridad del Boletín de los Científicos Atómicos.
Esta junta es el grupo creado por Albert Einstein y otros académicos para alertar al mundo sobre el peligro de las armas nucleares, aunque también forman parte una junta de patrocinadores, compuesta por once personas premios Nobel.
Desde el año 2007, el reloj incluye en sus valoraciones el deterioro del planeta debido al calentamiento global y la crisis climática.