LA LLUVIA PROVOCA DESPRENDIMIENTOS Y CORTES

Segundo día de caos en Las Palmas de Gran Canaria

El barro y las piedras han bloqueado varias carreteras y han complicado la circulación.

Los operarios de carreteras han trabajado duro desde primera hora de la mañana para limpiar con maquinaria la autovía Gran Canaria 2. Un desprendimiento de piedras y barro bloqueó la calzada sentido Las Palmas a la altura de El Altillo, en Moya. Imágenes como estas han sido la tónica general en el norte de la isla durante la noche y la mañana. Empezó a llover de madrugada con fuerza suficiente como para arrastrar piedras y tierra en varias carreteras de la comarca. Las cuadrillas no han parado.

Esas incidencias en distintas vías, especialmente en la Gran Canaria 2, han complicado mucho la circulación durante la mañana. Los cortes de varios carriles, el agua acumulada en el asfalto y el barro en las calles han creado grandes colas de coches. Los atascos se extendían a todas las vías de acceso a la autovía.

Monumentales colas para acceder desde Moya a la Gran Canaria 2 esta mañana. Con desprendimientos en la carretera de Los dragos y la Autovía también colapsada, los conductores no tenían más remedio que armarse de paciencia.

Se espera que mañana las lluvias empiecen a remitir

Las colas continuaban en la Gran Canaria 2. En varios puntos de esta vía y siempre sentido Las Palmas de Gran Canaria, se han tenido que cortar carriles. Esto es a la altura del rincón, con parte de un muro desprendido sobre la carretera. En el subterráneo de acceso a la granja del cabildo circulación complicada por inundación. Y un poco más al norte, más desprendimientos sobre la vía. Las colas formadas por todo esto, kilométricas. Con muchos minutos sin avanzar ni un metro. Aunque todo se puede complicar con una avería. Esta cascada,.

Terminaba dañando el barrio del altillo y quedándose al borde de las casas.

No ha sido un amanecer tranquilo.

Daños que se repiten cada vez que llueve, incluso dentro de las casas.

El agua corrió con fuerza suficiente para romper el asfalto.

Ha sido una mañana no apta para impacientes.

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