POR EL VINO NUEVO
Los bodegueros usaban las tablas para transportar los toneles hasta la playa para lavarlos con agua salada, hoy correr las tablas por San Andrés se ha convertido en una cita que nadie quiere perderse en Icod de Los vinos, donde la tradición está garantizada por que literalmente no hay edad para empezarPero no se trata de simples tablas, el diseño está pensado para proteger las manos y para que se deslicen al máximoY con el tiempo el metacrilato ha sustituido a la tea y las tablas tuneadas se imponen entre los más jóvenesPintadas o no llegan a alcanzar los 50 km/h, las inclinadas calles de Icod de los Vinos se convierten en una pista de velocidad donde las medidas de seguridad son bastante rudimentariasLa mañana de la víspera ha sido para los más jóvenes que fugados de colegios e institutos no faltan a la cita con las tablas de San Andrés.