NUESTROS RINCONES
Llega hasta nosotros gracias al afán de la familia De Armas, muy influyente en el municipio, que a finales del siglo XIX decide buscar un rincón donde cultivar todos los esquejes y semillas que traía como recuerdo de sus exóticos viajes.
Entre sus curiosidades, no podemos dejar de sorprendernos con el árbol de la Pitanga, y sus pequeños frutos rojos muy usados en zumos y mermeladas en América del Sur. O con el árbol de las calabazas, cuyos frutos nacen directamente desde el tronco y son muy utilizados en México en medicina popular.
Pero el encanto del Huerto de las Flores no se limita a su exuberante vegetación, Don Francisco De Armas convirtió su finca en lugar de tertulia de los grandes poetas canarios modernistas, como Tomás Morales o Alonso Quesada.
La belleza de sus jardines, la singularidad de sus ejemplares y la historia cultural de sus rincones hacen del Huerto de las Flores un rincón de obligada visita tanto para expertos y estudiosos, como para los enamorados de la naturaleza.