Tras lograr la pole y liderar el comienzo del GP de Rusia, Nico Rosberg tomó el camino del 'pit lane' por un problema en su acelerador. Primero le adelantó Hamilton y luego el resto de pilotos, para posteriormente ir al garaje, bajarse del coche y ver esfumarse su ya de por sí complicado sueño de ser campeón del mundo. "Si gana Hamilton tendré difícil el Mundial pero esto no se acaba hasta que esté imposible", dice un esperanzado Nico.