PROBLEMAS DE COMUNICACIÓN
La radio provoca tensiones entre los pilotos con sus equipos
El GP de Australia dejó patente algunas limitaciones aún en las escuderías. Como en las radios. El más crítico, Kimi Raikkonen. "Os dije que lo cambiárais, pero no me hicisteis caso", le espetó a un miembro del equipo.
Houston, tenemos un problema. No estamos en el Apolo XIII, pero la tripulación de los pilotos de la Fórmula 1 están en apuros. Las nuevas unidades de potencia tienen una compleja tecnología, sometida a mucho estrés. Y para estrés el que se perciben cuando se abren algunas radios de algunos equipos.
Sucesión de problemas en Australia. Problemas para Hamilton, para Vettel. Tanto se ha sobrecalentado la cosa que hasta el hombre de hielo, Kimi Raikkonen, le sube la temperatura cuando tiene que poner a punto el coche.
Las averías han aumentado la tensión entre pilotos e ingenieros. Tan horrible que llegar a meta para algunos es casi una misión a la luna. Vettel tampoco pasó de la vuelta 5.
Este año es fundamental comunicarse por radio, pero Raikkonen sigue teniendo claro que lo bueno si breve, dos veces bueno. "Tenéis que ser más precisos diciéndome los cambios", les dijo al pit lane.