Vettel se exhibe y se alza con la pole en Singapur con Alonso séptimo

Será por coche, será por piloto o será por estrategia. Sea por lo que sea, Sebastian Vettel parece asemejarse más a un extraterrestre a los mandos de su monoplaza que al resto de pilotos de la parrilla. Su 1:42.841 hizo posible que el piloto alemán descansara el último minuto y medio de sesión viendo como Webber, Grosjean, Rosberg y compañía se peleaban por las migajas. Alonso, que luchará durante la carrera, solo pudo ser séptimo con un tiempo demasiado humano para conseguir una proeza de otro mundo.

Como en cada primera sesión de clasificación disputada, se encendía el semáforo verde y pilotos como Sebastian Vettel o Mark Webber ni siquiera pisaban el box de su equipo. Tranquilidad absoluta en las balas violetas y es que, aunque es cierto que el resto de pilotos espera en sus respectivos monoplazas hasta los últimos minutos de la sesión, el gesto de ambos pilotos confirma que los Red Bull están muy por encima del resto y son conocedores de ellos.

El neumático duro era el elegido por los primeros pilotos que pisaban el asfalto de Singapur con sus gomas. Un neumático que muchos deberían cambiar por el blando a medida que avanzaba la sesión para no quedar fuera de la segunda sesión de clasificación. Hamilton, Raikkonen y el resto de favoritos no tardaban en salir a rodar, los Red Bull miraban atentos a sus competidores a la espera de su momento.

Alonso y su imposible
Por su parte, Fernando Alonso se veía envuelto en otra lucha, diferente a la que se verá en carrera. Para el asturiano los sábados son días de tortura, de sufrimiento, de esfuerzo en vano, de lucha sin premio. Por muy bien que lo haga el F138 no da para más: la cuarta posición que acariciaba en el ecuador de la sesión era oro puro, el podio era un imposible y más con la estrategia de Red Bull.

Red Bull: coche, piloto y estrategia
En la Fórmula 1 no todo es el piloto ni el coche. La estrategia es vital y Sebastian Vettel y Mark Webber daban cuenta de ello al salir a pista en el momento exacto, cuando ningún otro piloto rodaba en pista: vía libre para la pole.  Con el circuito libre para su exhibición, Sebastian Vettel conseguía planear en Marina Bay y marcaba un suficiente 1:45.755. Su participación estaba asegurada en la siguiente sesión pero el resto de pilotos de la parrilla conseguían mejorar los tiempos del campeón del mundo y de su compañero.

Con el pie del acelerador levantado por parte de Vettel y Webber, Hamilton consiguió subir hasta la primera posición gracias a su 1:44.196, seguid de Button y Alonso, a ocho y nueve décimas respectivamente. El asturiano cumplía y Massa sufría aunque al final eran Di resta, Maldonado, Pic, Van der Garde, Chilton y Bianchi los que se quedaban fuera de la segunda sesión.

Kimi y Fernando serán compañeros en 2014 pero en el inicio de la Q2 parecían formar ya parte del mismo equipo. La pista estaba vacía y solo el asturiano y el finlandés decidían rodar desde el principio de la sesión. Aún así, Raikkonen no encontraba el 'feeling' con el circuito. Parece que el anuncio de su fichaje por Ferrari y la disputa existente con Lotus han hecho que el campeón del mundo  no quiera pelear más este año.

Con el paso de los minutos se empezaba a disipar la parrilla de salida. Los Mercedes bajaban del 1:44, tiempos de extraterrestres para los mortales...pero no para Vettel. El alemán y su RB9 son de otra pasta y su tiempo lo demostraba: 1:42.905. Exhibición 'made in Germany' y al box; era el turno del resto de pilotos y de la sorpresa del día.

Raikkonen, 'out'
Kimi Raikkonen completaba junto a Hulkenberg, Vergne, Pérez y Bottas la lista de eliminados de la Q3. Parece que, desde que se hizo oficial que su futuro no seguiría ligado a Lotus, el finlandés ha levantado el pie del acelerador.

'Récord Vettel'
El tiempo marcado en la segunda sesión era de extraterrestre pero Vettel es de otro planeta y tras su primera vuelta al circuito en la última sesión de clasificación el alemán conseguía batir su propia marca con un espectacular 1:42.841. Demasiado para Rosberg, Webber, Hamilton, Grosjean y Alonso. Tanto que, a falta de un minuto y medio para el final, el tres veces campeón del mundo decidía bajarse del monoplaza y contemplar el resto de la tanda como otro espectador cualquiera.

Clasificación violeta y Mundial más cerca de un piloto que agarra con las dos manos su nuevo cetro. Solo le falta levantarlo y, para evitarlo, Fernando Alonso buscará un milagro en Singapur.