El Principado de Mónaco es una ciudad-estado muy especial por distintas peculiaridades. A parte de ser el país más pequeño del mundo y estar regulado por el Principado de los Grimaldi, que tomó el señorío de Mónaco en 1927; su sistema fiscal ( no aplica gravámenes sobre la renta de sus habitantes) y su casino de fama internacional, son algunas de las particularidades que han hecho de este país de la Costa Azul un lugar único.
La espectacularidad de la Fórmula 1 y el lujo y el glamour de Mónaco se unen los días 24, 26 y 27 de mayo para ofrecer una de las carreras más emocionantes del calendario en un circuito legendario.
El GP de Mónaco supone una puesta de largo para el famoseo internacional en la que las caras más 'in' circulan por el 'paddock' y las lujosas calles de la capital del Principado. Las habituales 'pit babes' son otra parte importante en el GP de Mónaco, las chicas del 'paddock' animan la carrera con sus sugerentes monos de latex o bikinis imposibles en una sucesión de piscinas, cuerpos bronceados y glamour.
En 2011, la carrera se convirtió en un hervidero de famosos. Las novias de los pilotos habituales como la pareja de Lewis Hamilton Nicole Scherzinger, Jessica Michibata y Vivian Sibold, novias de Jenson Button y Nico Rosberg, las hijas del magnate de la F1 Bernie Ecclestone, Tamara y Petra Ecclestone, la esposa de Flavio Briatore, Elisabetta Gregoraci, así como la ex Spice Girl Geri Halliwell pusieron la nota de papel cuché a la competición entre otras personalidades como Mick Jagger, Paris Hilton o el tenista Novak Djokovic.
Los pilotos se visten de largo
Como es tradicional Fernando Alonso estrena casco en el GP de Mónaco. Los pilotos tiran de ingenio y diseño para sorprender a los espectadores de Montecarlo. Cascos, monos o monoplazas. Cualquier parte es buena para lucir algún eslogan o dibujo. Este año Alonso optará por los dados, las cartas de póker y las fichas de casino para personalizar su casco en este carrera.
Una de las principales fuentes de ingresos de Mónaco es el turismo. Cada año, muchos visitantes se sienten atraídos por su agradable clima y su lujoso Casino (a los propios ciudadanos de Mónaco no se les permite jugar en el casino). Los precios de los hoteles y apartamentos son desorbitados (la opción más económica para pasar una noche en Montecarlo ronda los 600 euros), por ello, muchos de los aficionados que pueden permitirse disfrutar de la carrera en el circuito optan por alojarse en otros pueblos cercanos a la capital con presupuestos algo más económicos.