Puerta Grande para El Juli, Jesús Duque y Enrique Ponce, que resultó cogido grave

En su plaza, Enrique Ponce sigue haciendo números, y en su primera tarde en la Feria de Fallas 2014 abrió la 38 Puerta Grande. Desde la enfermería, pues fue cogido al entrar a matar al segundo de la tarde –el primero correspondió a Jesús Duque, que tomaba la alternativa-, sufriendo una cornada de 25 centímetros en la axila derecha y fractura de la clavícula izquierda.

Este miércoles, San José, el de Chiva será será sustituido por Finito de Córdoba, que abre de este modo la ‘monstruo’ de Fallas, por delante de Morante, El Juli y Manzanares, que lidiarán toros de Garcigrande.

Antes, Ponce había completado una de sus faenas pluscuamperfectas, tanto que sus paisanos no llegaron a emocionarse casi hasta el mismo momento de la cogida. Tiempos, distancias, terrenos y colocación. De manual. Y estocada a ley, por eso la cogida al taparle la salida el toro.

Cumplía su sueño de hacerse matador de toros Jesús Duque, con Enrique Ponce de padrino y El Juli como testigo. Al toro del bautismo le pegaron en el caballo, y a la muleta del valenciano llegó como dormido, sin ganas de embestir. Cuando lo hizo, fue andando, y Jesús supo adaptarse.

Muy tranquilo, el toricantano fue construyendo una faena con tandas bien ligadas de muletazos al ritmo que imponía el de Victoriano del Río. Su labor, premiada con una cariñosa vuelta al ruedo.

El tercero de la tarde, con cositas de noble al inicio, fue tornándose brutote. El Juli se mantuvo firme, tirando de él cuando fue necesario, acortando distancias cuando se paró el de Victoriano y, en todo caso, mandando y templando las embestidas. Las buenas y las menos buenas. Cayó trasera la espada y falló con el descabello. Ovación.

El cuarto también correspondió al madrileño, que decidió matar seguidos el primero de su lote, y el que hubiera correspondido a Ponce. Brindó ese toro Julián a la cuadrilla de Enrique Ponce. Salió el de Velilla de San Antonio a revientacalderas, manejándolo sin aparente dificultad hasta templar la embestida.

Cogiendo al toro muy delante y acabando muy atrás los naturales, sin perder pasos. Poder, mucho poder. Y cuando protestó, mandando y por abajo. Faena en fin, para profesionales, que también llegó al tendido. Pinchó arriba El Juli. Tardó en morir el toro tras una certera estocada. Oreja.

Al correrse el turno, a Jesús Duque le correspondió el quinto. Se fue el de Requena a recibirlo a la puerta de chiqueros. El de Victoriano fue más pronto y suavón que sus hermanos. Cuando le bajó la mano el toricantano el toro ‘planeó’.

Un punto menos de velocidad habría cuadrado el círculo, pero estuvo ahí. La bravura del toro, de incansabe embestida, provocó que el público pidiera el indulto al final. No se puso nervioso Duque, y cobró una buena estocada casi al encuentro. Dos orejas.

Al que cerraba plaza lo recibió El Juli con una larga de rodillas. El toro, el de más romana de la corrida (585kg), cantó enseguida su falta de fuerzas. Medido en el caballo, llegó medio rajadito a la muleta. Le dio a éste su lidia también Julián, que le sacó lo que no tenía, sobre todo por el medio potable pitón derecho. Media estocada, un punto trasera. Oreja.

Enrique Ponce sufre fractura de clavícula y una cornada en la axila

El diestro Enrique Ponce fue cogido este martes al entrar a matar a su primer toro en la corrida de las Fallas de Valencia.

Según el parte médico, Ponce fue intervenido de una cornada de 25 centímetros, que alcanzó el espacio subclavicular, disecó completamente el pectoral y provocó un hematoma perivascular y perinervioso.

También sufre una fractura de clavícula izquierda, pendiente de estudio radiológico en la clínica La Salud, donde fue trasladado. Duque tomó la alternativa con el toro 'Jilguero', nº 90, negro bragado, de 520 kilos.

El toro, de la ganadería de Victoriano del Río, prendió al diestro valenciano en el momento de entrarle a matar, para posteriormente prenderle aparatosamente en el suelo.

Una vez en pie, las asistencias le quitaron la chaquetilla al diestro, mostrando así una gran mancha de sangre en la axila derecha, producto de una cornada. Ponce le hizo a ese toro, noble y soso, una pulcra y limpia faena que, tras la estocada en la que resultó cogido, se premió con una oreja que recogió su banderillero Mariano de la Viña.

Ficha del festejo

Seis toros de Victoriano del Río, desiguales de presentación y volúmenes y también de juego variado. Destacaron por su gran bravura los toros cuarto y quinto. A éste último se le premió con la vuelta al ruedo en el arrastre.

Enrique Ponce: estocada trasera (cornada y oreja que recogió la cuadrilla).

El Juli: estocada trasera y dos descabellos (ovación); pinchazo y estocada trasera (oreja tras aviso); y media estocada tendida y dos descabellos (oreja).

Jesús Duque, que tomaba la alternativa: estocada tendida trasera (vuelta al ruedo tras leve petición); estocada (dos orejas).

Juli y Duque salieron a hombros. La plaza casi se llenó en el décimo festejo del abono de Fallas, en tarde ventosa y fresca.