Los aficionados a los tatuajes han puesto de moda una peligrosa tendencia que ha cobrado adeptos entre los aficionados más radicales. Se trata de los tatuajes del globo ocular que tiñen la membrana de un color diferente para que pierda su color blanco. La práctica se denomina 'eyeball tatoo'. Algunos expertos tatuadores defienden esta moda y aseguran que la aplicación de tinta se realiza posteriormente a aplicar un colirio protector de la zona.
Sin embargo, especialistas oftalmológicos aseguran que tintarse los globos oculares es un procedimiento irreversible que puede provocar lesiones severas de la cornea pudiendo afectar incluso a la visión.
Parecerse a los personajes de sus series favoritas es una de las principales motivaciones de quienes deciden tatuarse los ojos. El gran éxito de la serie de zombies 'The walking dead' en la que los 'caminantes' cuentan con ojos rojos que parecen inyectados en sangre, ha hecho que muchos aficionados quieran emular ese efecto en sus propios ojos.