Pesa 250 gramos y tiene el tamaño de una lata de refresco. A sus tres años, la perrita 'Little Meysi' es la niña mimada de su casa y sus dueños deben andarse con mucho cuidado ya que un descuido podría resultar mortal.

De hecho, este minúsculo terrier polca sobrevivió de milagro, ya que su dueño casi lo tira a la basura cuando nació al creer que era un trozo de placenta, según informa Daily Mail.

Ahora mide siete centímetros, tres menos que el can que ostenta el título y su dueño está muy ilusionado en conseguir que su mascota logre pasar a la posteridad en el Libro Guiness de los Récords.

Pese a su pequeño tamaño, aseguran que tiene un carácter valiente y que es mucho más ágil de lo que cabría esperar.