Rajoy, la experiencia de un líder tranquilo

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy se define como un hombre normal en su vida privada, pero en el ámbito político se le reconoce como resistente, prudente y tranquilo, sobre todo en los momentos difíciles.

Nacido en 1955 en Santiago de Compostela, ha pasado por diferentes cargos, locales y nacionales a lo largo de su carrera política. Estudió derecho y con 24 años se convirtió en el registrador de la propiedad más joven del país.

A los 31 años se convirtió en el vicepresidente de la Xunta de Galicia y años más tarde, en 1986 fue elegido diputado nacional. Por ello hace gala de su trayectoria y asegura que para gobernar "hay que haber sido al menos concejal".

Durante los ocho años de mandato de José María Aznar, llegó a ser ministro de cuatro carteras diferentes: Administraciones Públicas, Educación y Cultura, Interior y la Vicepresidencia del Gobierno.

Fue el propio Aznar quien eligió a Rajoy como candidato a sucederle en 2004, en unas elecciones en las que pese a verse ganador, llevaron al poder a José Luis Rodríguez Zapatero. Cuatro años más tarde, el socialista volvió a ser elegido presidente y Rajoy decidió convocar un congreso extraordinario de su partido en Valencia, donde fue reelegido por mayoría.

En 2011 Rajoy alcanzó la Jefatura del Gobierno haciéndose con la mayoría absoluta. Durante su mandato abandonó su programa electoral y optó por aprobar un paquete de medidas para reducir el déficit público. Tuvo que pedir además asistencia financiera a la Unión Europea para sanear la banca.

También se ha visto salpicado por la corrupción que ha afectado a dirigentes y cargos públicos de su partido por lo que ha sido duramente criticado.

Rajoy es celoso de su vida privada. Un hombre discreto, casado y padre de dos hijos. Precisamente llama mucho la atención al eludir los focos. Ha sido criticado por no ofrecer ruedas de prensa y hacer declaraciones institucionales a través de las pantallas.

En el debate decisivo de Atresmedia las críticas se redoblaron cuando envió a su vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, a debatir con los líderes de PSOE, Podemos y Ciudadanos.

Pese a no gustarle las declaraciones a los medios, Rajoy ha salido a la calle para intentar repetir como presidente. Las encuestas le dan ganador, pero con una mayoría simple que le haría necesario pactar con otro partido.