En Nochevieja

Así se prepara el reloj más famoso de España para las Campanadas

Su mantenimiento a lo largo del año es imprescindible y su labor el último día del año es milimétrico y constante.

En España, la tradición en Nochevieja es tomarse las uvas viendo la retransmisión de las Campanadas en televisión. También se da el caso de los que viven en directo esta celebración desde la Puerta del Sol, que siempre se llena de gente el 31 de diciembre.

Para que todos podamos disfrutar de esta tradición, es fundamental el trabajo de Jesús López-Terradas, relojero de la Puerta del Sol, y de sus compañeros. Ellos son los encargados de comprobar que todo esté a punto a la hora de las Campanadas.

Se trata de una labor milimétrica y constante, en la que es fundamental tener precisión de relojero. Mientras uno está pendiente del mecanismo de la bola, otro se encarga del movimiento, otro de la sonoridad de los cuartos y otro de las horas.

Aunque la posibilidad de fallo es muy pequeña, no llega a ser nula, por eso es fundamental el mantenimiento del reloj durante todo el año. Por cierto, José Rodríguez Losada fue quién, en 1866, donó este reloj al Ayuntamiento de Madrid después de varios años de cuidadoso trabajo.

¿Qué diferencia las campanadas de los cuartos?

Lo primero que escuchamos antes de tomarnos las uvas en Nochevieja es el carillón, una bola que hace un ruido muy característico mientras baja durante siete segundos y que aparece justo 28 segundos antes de la medianoche.

Después de esto, y tras una pausa de tres segundos, comienzan los cuatro cuartos, que duran cuatro segundos cada uno. Tienen un sonido muy característico, como una campanada doble.

Cuatro segundos después llegan las 00:00 y con ellas, las Campanadas, que suenan cada tres segundos. Se diferencian de los cuartos porque su sonido no es doble. Además, si veis las Campanadas en Antena 3, no debéis preocuparos, ya que os las indicarán perfectamente tanto los presentadores como la pantalla. ¡Os esperamos el día 31 de diciembre!